𝐬𝐮𝐦𝐦𝐞𝐫 𝐥𝐨𝐯𝐞 📌 𝐦𝐢𝐧𝐬𝐮𝐧𝐠 ( 𝐬𝐭𝐫𝐚𝐲 𝐤𝐢𝐝𝐬 ) [ PAUSADA ]

·eight·

Jisung se sentía mal por haber dejado plantado a Minho, así que decidió que al día siguiente le llevaría a un lugar muy bonito que había conocido el mismo día.

Decidió ir a buscar a Minho a su habitación. Por la mañana únicamente estarían en la piscina.

Recién llegó al pasillo correspondiente con la habitación del pelinegro, dió cuatro toques no muy fuertes en la puerta y al poco tiempo, esta fue abierta por un Minho recién despertado.

-H-hola Minho. ¿Te desperté?-preguntó el menor con miedo de haber despertado a su hyung y que este ahora le odiara por ello.

-No, tranquilo, ya estaba despierto.-respondió el pelinegro más tranquilo de lo que Jisung esperaba.-¿Ocurre algo?-le preguntó al chico en frente suya.

-No no, solo venía a buscarte para que vinieras conmigo a la piscina. ¿Te parece?-

-Sí, claro. Me preparo y bajamos.-respondió Minho a la pregunta del más pequeño.-Ven, pasa.-le ofreció para que no se quedara quieto y esperando en el pasillo de aquel hotel.

Después de que Minho estuviera listo, ambos bajaron a la piscina. Escogieron las mismas tumbonas de siempre y se sentaron a charlar un rato antes de meterse en la piscina, como ya era de costumbre.

-¿Sabes? Extrañé no estar ayer por la tarde contigo, Sungie.-se notó que Minho dijo aquello con un tono de tristeza.

-Lo siento mucho, Minho. Yo también extrañé no estar contigo, pero ya sabes, mis padres querían estar un rato en familia.-respondió el menor.

-Sí, entiendo, no te preocupes.-

-Igualmente, hoy te compensaré por haberte fallado ayer.-dijo sonriente el pelinaranja.

-No hace falta, Sungie. En serio.-

-Si hace falta. Así que me da igual que vayas a protestar.-dijo el menor a lo que Minho suspiró, dirigió la mirada hacía él y le preguntó:

-¿Y qué piensas hacer?-

-Te voy a llevar un sitio cerca de aquí. Es precioso, te va a encantar.-respondió Jisung sin borrar su sonrisa.

-¿El sitio es tan bonito como tú?-preguntó el mayor con tranquilidad a lo que Jisung empezó a sonrojarse y le dió un golpe suave en el brazo.

Minho rió por la reacción del menor y decidió ignorar el hecho de que este se hubiera sonrojado.

-Bueno, olvida lo que dije.-dijo riendo.

Pensó que era bueno decir aquello ya que relajaría un poco al pelinaranja.

-¿Quieres que sigamos con tus clases de natación?-preguntó al chico mirándole con una leve sonrisa.

-Sí, por favor.-respondió el menor levantándose y dirigiéndose a las duchas.

Una vez ambos se metieron en la piscina, Minho le dió varios consejos de como mantener la respiración bajo el agua.

Jisung realmente parecía un niño pequeño, atendía y obedecía a todo lo que Minho le decía.

-Entonces, ¿entendiste cómo tienes qué hacer para no ahogarte?-preguntó el pelinegro mirando fijamente a Jisung, a lo que el menor asintió moviendo la cabeza.-Perfecto. Ahora, hazlo.-

Y tal y como Minho dijo, Jisung empezó a nadar de la misma forma que el anterior nombrado le explicó.

-¿Lo hice bien, hyung?-preguntó el menor una vez salió del agua.

-Sí, lo hiciste genial.-le respondió Minho con una sonrisa en sus labios.-Igual ahora tienes hambre, ¿quieres que vayamos al restaurante del hotel a coger algo de comida?-

-Sí, por favor-pidió el menor saliendo del agua.

→→→

Una vez ya cogieron la comida y regresaron a las tumbonas, estuvieron hablando sobre lo que harían esa tarde.

Minho le preguntó exageradas veces que a dónde le llevaría, pero Jisung se negaba a decirle el lugar, quería que fuese una sorpresa.

-Venga Sungie, aunque sea dame una pista, por favor.-suplicaba el pelinegro al menor.

-Ya te dije que no, Minho. Es una sorpresa.-respondió el pelinaranja.

Minho se rindió y decidió no preguntar más. Tendría que esperar hasta esa tarde, entonces.

Ambos chicos acordaron en verse a las seis de la tarde en la zona de la piscina, para ir hacia el lugar el cual Jisung dijo que llevaría a Minho.

→→→

Llegó la hora en la cual acordaron verse y ambos jóvenes bajaron hasta la piscina para encontrarse con el contrario.

Minho juró que cuando divisó a Jisung, sintió como si estuviera frente a un ángel.

Jisung realmente estaba precioso.

Jisung era precioso a los ojos de Minho.

-Dios Jisung, estás precioso.-soltó Minho mirando al menor de arriba a abajo.

Y como era de esperar, Jisung se sonrojó ante el comentario de su mayor.

-G-gracias hyung.-dijo mirando hacia el suelo.

-Bueno, ¿vamos ya?-preguntó impaciente el pelinegro.

-Sí. Vámonos.-

Jisung ni si quiera apartó la mirada del suelo. En ese momento no se atrevía a mirar a los ojos a Minho. Se sentía como si le hubiera confesado sus sentimientos hacia él.

Se estaban dirigiendo a el lugar del que Jisung tanto habló y aún ninguno de los dos había dicho ni una palabra. Iban caminando en un silencio que, sorprendentemente, era bastante cómodo para ambos.

Pero Minho no aguantó más y decidió romper aquel silencio que Jisung estaba agradeciendo bastante.

-Oye Jisung.-

-Dime.-

-Sabes ir a ese sitio, ¿verdad?-preguntó el mayor con un poco de miedo que se hizo notar en su tono de voz.

Jisung rió y contestó a la pregunta del mayor.

-Claro que sé ir, tranquilo que no nos vamos a perder.-

Al cabo de unos veinte minutos, llegaron al lugar. Ambos agradecieron que tuvieran asientos porque realmente estaban cansados de caminar tanto.

El sitio era realmente bonito. Era una especie de cueva con flores y árboles bastante agradables. Destacaba que tenía pequeños animales, como conejos, ardillas y demás. Había un espacio con una pequeña playa, si se podía denominar así, ya que solamente tenía un leve espacio con arena y el resto era mar, pero al menos podrían refrescarse un poco.

Minho estaba muy agradecido con Jisung por haberle traído hasta allí.

-Sungie.-llamó al menor a lo que este contestó mirándole.-Muchas gracias por traerme aquí. Es un lugar precioso. Gracias, en serio.-dicho esto, el pelinegro le dedicó una sonrisa.

-No me des las gracias, Minnie.-era la primera vez que Jisung llamaba a Minho con un apodo cariñoso.-Y, te dije que te iba a gustar. Es un lugar muy bonito.-

-¿Sabes que más es bonito y está aquí también?-preguntó Minho mirando con una sonrisa al menor.

-No, ¿qué es?-preguntó devolviéndole la sonrisa.

-Tú.-

Jisung amplió más su sonrisa y, con las mejillas levemente sonrojadas, se acercó para abrazar con cariño al mayor.