Capítulo 8

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Hoseok POV.-

Negué mientras me tragaba la aspirina, no había podido pegar el ojo en toda la maldita noche, había imaginado mil maneras diferentes de matar a mi amigo ¿Cómo se le ocurrió poner un puto dedo sobre Taehyung?

—¿Me llamarás? —la voz de Hani me sacó del abismo de pensamientos en el que me hundía poco a poco.

—No lo sé.

–¿Todavía te duele la cabeza? —preguntó ella acariciando mis cabellos, siendo rechazada inmediatamente cuando moví la cabeza a un lado para evitar que siguiera haciéndolo.

—Hoseok —reclamó.

—No ahora Hani, la cabeza me revienta —dije de mala gana.

—Entonces tal vez no deberías ir a ese famoso viaje de negocios —soltó ella ácidamente.

—Basta.

—¿Por qué tanta desesperación en...?

—Hani, he dicho basta.

—¡No vas a hacerme callar Hoseok, soy tu esposa y me tienes que respetar!

Rodé los ojos y caminé hacia la puerta de la casa, no tenía ánimos para esta discusión hoy.

—A veces pienso que no has cambiado en absoluto —acusó ella sujetando mi antebrazo —no me gusta que vuelvas a esa horrible actitud de querer controlar todo Hoseok, tú me prometiste dejar esa porquería de lado cuando Yeeun...

—Tal vez esa porquería significa más para mí de lo que tú puedes entender Hani.

—Últimamente me pregunto si tomé la decisión correcta al quedarme a tu lado —dijo desviando la mirada.

—Yo me lo pregunto cada día —dije liberando mi brazo de su agarre y caminando hacia el auto.

Ignoré su lastimero llamado para retenerme, si no quería recibir comentarios punzantes no debería lanzarlos ella primero. No me sentía culpable en absoluto... Y si se lo contaba a Taehyung sabía que él entendería.

Manejé con calma hasta el colegio para la clase de baile, comuniqué a Taemin que Kim no podría asistir y, de hecho, Jeon tampoco asistió hoy. Odié la clase entera porque cierto moreno no estaba por aquí dando vueltas y meneando el culo alrededor.

Camino a la plazuela para recoger a Taehyung paré en un restaurante, mientras espero que me traigan mi orden para llevar veo entrar a Hani junto a una mujer que trabaja con ella, nunca puedo recordar su nombre porque nunca he prestado atención cuando habla de ella. Las vi sentarse relativamente cerca a mí, por lo que de manera disimulada me acerqué para poder escuchar su conversación, sé que esa mujer es sinónimo de problemas.

—Tal vez sólo estoy exagerando —dijo Hani suspirando —al fin y al cabo fui yo la que...

—Pero cariño —cortó la mujer esa —él te prometió cambiar sus malos hábitos cuando se casaron ¿Y ahora nuevamente intenta controlarte? Tú no eres una muñeca que él puede manejar a gusto.

—Lo sé, pero...

—Creo que deberías dejarle saber quién manda –opinó la mujer esa asintiendo.

Bufé y rodé los ojos ¿Sólo era un mal hábito para Hani? ¿Esas eran sus palabras ó las palabras de esa mujer?

—Ay Jinri —respondió Hani —creo en serio que lo estoy perdiendo.

—¿Y es por ese chiquillo? —preguntó Jinri.

—Creo que sí, digo, Hoseoki ha cambiado tanto desde que ese mocoso entró a nuestras vidas. La manera en la que se comporta con mi esposo... Puedo ver que es una zorra que necesita que la eduquen adecuadamente, pero... Al mismo tiempo... No sé.

Chains and Whips HopeVWhere stories live. Discover now