- ¿Esperándome?. ¿Cómo sabías que venía hacia acá?.– No, si esta mujer es muy inteligente.
- Jennie...S-soy yo.
- Claro que eres tú.– Rió obvia.
- Soy Lisa.– Todo se quedó en silencio. La sonrisa de Jennie desapareció.– Y-yo...Perdón por mentirte...Sé que fuí una idiota, y yo--
- Dios. ¿Sabes lo mal que me sentí, Lisa?.
- P-perdón...
- ¡Y yo pensando que te había engañado!.
- Per-- ¿Qué?.
- Lisa, te iba a decir que había besado a otra chica. ¡Y eras tú!. Idiota.
- ¿Qué?.
- ¡¿Sabes lo culpable que me sentí?!.– Proseguía.
- Jenn--
- ¡Y lo malditamente bien que besas!.
- ¡JENNIE!.– Calló a la morena. Al comprobar que ésta le prestaba atención, prosiguió.– ¿No estás enfadada porque te mentí?.
- Claro que lo estoy, Lisa.– Pero Lisa sabía que no era tan serio.– Por una parte estoy feliz.
- ¿Feliz?.
- Si. Me gustan ambas. L.M, y la supuesta Chaeyoung.
- ¿Por qué?.
- Bueno, L.M es muy atenta, y divertida, y la supuesta Chaeyoung es muy buena besando, y tiene puntos extras...
- ¿Puntos extras?.
- ¿Cómo no me iba a dar cuenta del GRAN PUNTO EXTRA?.
- ¿N-no te da asco?.
- ¿Asco?. ¡Ni en mi sexta vida me daría asco!.
- ¿En serio?.– Lisa aún no se lo creía.
- ¡Claro que es en serio!.– Dijo.– Eres una chica muy sexy, hermosa, divertida y atenta. Eres perfecta...No más que yo, claro.
Todo era como un sueño para Lisa...