Kamui

325 40 7
                                    

-¡Ahora! - Gritó Obito. Activamos en Mangekyou. Nuestras pupilas tomaron la misma forma.
-¡Kamui! - Gritamos al unísono. La enorme roca frente a nosotros desapareció en un remolino de color gris. Estando juntos podíamos enviar rápidamente objetos bastante grandes a la otra dimensión. Cuando estaba solo, lo más que pude enviar fue a Obito mismo, y me tomé mi tiempo.

-Excelente, esta vez no quedó nada de este lado. - Dijo Obito entusiasmado. Lo miré sonriendo, me faltaba el aire, había agotado mi chakra. Obito se veía distorsionado.

Estaba en el suelo. Abrí lentamente los ojos. El brillo de una llamarada me encandilaba. Era de noche, Obito estaba sentado junto a mí asando unos pescados que olían delicioso.

-Vaya, ahora sí te tomaste tu tiempo en reaccionar. Aun así, es impresionante que hayas logrado un cuarto Kamui en una sesión. Toma. - Dijo acercándome un pescado. Me incorporé lentamente, me bajé la máscara y le di un mordisco que me supo a gloria, sentía mi chakra aumentar con cada bocado. Me acabé el pescado antes de hablar.

-Gracias. Creo que mantendré mi límite en tres. De nada me servirá desmayarme en medio de una misión.-

-Has mejorado bastante, las primeras veces sólo lo lograste una vez, y terminaste en cama tres días. -Dijo acercándome otro pescado que tomé con gusto. -Deberías descansar un poco, quiero enseñarte a transportar sólo una parte de tu cuerpo, así podrás evitar ataques directos.-

-No sé si mi cantidad de chakra permita eso.-

-No se requiere más de lo que se usa para un objeto pequeño.-

-Tendremos que intentarlo. -

Me quedé mirando el fuego. Imaginando las posibilidades de usarlo en batalla.

-Tierra llamando a Kakashi- Dijo. Volteé a mirarlo.

-¿Hmm?-

-Estabas en la luna. - Dijo riendo. - ¿Qué crees que estaría haciendo Rin, si estuviera aquí?- Lo pensé por un momento. Demasiados pensamientos tristes pasaron por mi cabeza, me miré la mano derecha, volvía a estar llena de sangre. Cerré los ojos, suspiré.

-Seguramente tendría que estarme yendo porque ustedes no podrían quitarse las manos de encima.- Dije sonriendo.

-Vaya, me agrada tu tren de pensamiento... aunque yo pensaba en que estaríamos los tres riendo, comiendo oniguiris hechos por Rin, en alguna misión lejos de la aldea. - Dijo mirando la luna. -Vamos a casa.- Nos incorporamos y regresamos a la aldea.

Me quedaban solo 2 días de permiso. Había logrado teletransportar partes de mi cuerpo a voluntad, pero solo tres veces estando Obito, y dos estando yo solo. Era evidente que solo lo podría utilizar el Kamui en caso de emergencia.

-Muy bien Kakashi. Hoy se termina tu permiso.- Dijo mi sensei, quien había tomado el lugar de Hokage un par de semanas antes. mis compañeros estaban a mi alrededor. -El tercero me dio los pormenores de la situación. Me alegra que tú y Obito hayan logrado tanto. En tu reporte veo las ventajas de esto en batalla, y me gustaría probarlas cuanto antes. Algunos miembros de Akatsuki fueron vistos en la frontera con Suna. Esta sería una misión rango S. Tu equipo de ANBU esta listo para partir, están informados de la situación. Tengan cuidado.

-¡Hai!- contestamos.

-Dispérsense.- Ordenó, salimos de su oficina y nos dirigimos a nuestro destino.

Había llegado el momento de probar el entrenamiento.

Llegamos a la zona al atardecer. Desde la distancia observamos dos figuras, uno era ancho y bajo, el otro se veía alto y tenía una espada, si no me equivocaba aquella espada era Samehada. Solo había pocos shinobis capaces de portarla.

El hombre bajo resultó ser usuario de marionetas, en algún punto estuvimos en desventaja. Tenzou estaba librando tremenda pelea con Kizame. Los demás estabamos peleando contra cientos de marionetas, el usuario, que se había presentado como Sasori, se veía muy confiado.

-Han dado buena batalla, pero veamos si pueden con esto.- Dijo. De su túnica sacó un pergamino de invocación. El Kazekage usuario de hierro salió de éste.

Ibamos perdiendo ventaja con cada golpe.

Era el momento. Tenía que lograrlo.

"Concentrate Kakashi. Enfoca tu chakra en el área del cuerpo que quieras enviar, y el resto en el sharingan." Escuché las palabras de Obito.

Me lanzaron un ataque que esquivé con el Kamui, había usado más chakra de lo esperado, pero lo logré, sin un rasguño.

-¿Cómo es posible? ¡Estoy seguro que fue un golpe directo!- Grito Sasori. Sonreí

Era nuestra oportunidad. Para un objeto tan grande necesitaba enfocar bien, y la máscara me estorbaba, me la quité sólo lo suficiente.

-¡Kamui!- Grité. Enfoqué toda mi energía en enviar la marioneta del Kazekage a la otra dimensión. La marioneta desapareció en un remolino de colores oscuros.

-Kizame, vámonos. Tienen un Mangekyou Sharingan.- Se retiraron y cruzaron la frontera, así que no pudimos seguirlos más allá.

Regresamos a la aldea. Le llevé el reporte al Hokage.

-Lamentablemente no logramos detenerlos, pero su batalla nos ha dado mucha información de que podemos esperar de Akatsuki... Sasori y Kizame... En cuanto al Sharingan, bien hecho Kakashi, ¿cómo te sentiste?-

-Gasté mucho más chakra de lo que esperaba, se notaba la ausencia de Obito. Pero funcionó muy bien. Lamentablemente me tuve que quitar la máscara, y vieron el Mangekyou. -

-Creo que lo habrían descubierto tarde o temprano. Vayan a descansar hoy. Los reuniré para darles su siguiente misión.-

Salí de ahí, fui a casa, me quité la máscara de ANBU y me miré al espejo.

Tenía mucho que entrenar. Me lavé la cara.

Alguien tocó la puerta. Fui a ver quien era.

-¿Cuándo me vas a pagar el ramen que me debes?- Dijo Obito.

-Vamos.- Dije, tomando mis llaves.

-Bien, sirve que me cuentas como fue tu misión.-

-Sabes que es secreta.-

-Vamos, al menos solo la parte del Kamui.- puse los ojos en blanco. Sabía que no me dejaría en paz hasta que le contara. Tendría que aceptar la tortura.

-Primero comamos, que gasté demasiado chakra.- Dije. Fuimos a pagar mi deuda.

カカシ と おびとDonde viven las historias. Descúbrelo ahora