Hablas de como te fue en la semana que pasó, pero te escucho. No es como si no quisiera, solamente grabo en mi memoria todos tus gestos.
Dejas de hablar y me preguntas si estoy bien. Yo asiento y te pido que me continues contándome sobre tu semana, pero no quieres y me dices que te cuente de la mía.
Mi corazón late tan rápido cuando me miras de esa manera, tan cálida y amable.
Sin pensarlo, agarro tus manos. Son tan grandes a comparación de las mías.
¿Se lo digo?, pienso mientras sobo con mis pulgares tus nudillos.
Me gustas, digo sin siquiera verte el rostro, me gustas demasiado y no de una manera de amistad o fraternal, inhalo y continúo, me gustas desde hace casi cuatro años, lo siento.
No dice nada y mi corazón comienza a doler, sabía que no tenía que decir nada.
Me sorprende el abrazo que me das, sosteniéndome como si temieras a que huya.
Tú también me gustas, dices con tu voz temblorosa que no conocía, perdón por ser tan tímido y prácticamente empujarte a que lo digas.
Tu abrazo se vuelve más fuerte y recién te correspondo.
Y también me despierto.
Tu agarre de tu abrazo todavía lo siento alrededor de mi cuerpo. Siento como si todo hubiera pasado de verdad.
Pero era un sueño, un estúpido y hermoso sueño.
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Random Stories
DiversosEste será como un libro para mí para poner historias que se me ocurren de la nada. Si tu nombre está aquí, es casualidad... pero si tu personalidad tambien está... tambien es casualidad. Historias que se me ocurren de la nada o por inspiración de ac...