chapter threeten

984 67 13
                                    


Estaba desgastada, ¿Acaso era posible sentir tantas emociones en un solo día? Era una ensalada de sentimientos.

Medité sobre que me haría sentir mejor, y enseguida pensé en mi amigo Gryffindor. Aprovechando que estaba relativamente cerca, decidí averiguar si se encontraba en su sala común.

Subí las escaleras lentamente, para posteriormente estar frente a frente con alguien que conocía poco. Nerviosamente, le pregunté sobre Oliver.

—Ehh...Hola, ¿Oliver Wood está ahí adentro?.

—Oh, así es, pero me temo que no puedo dejarte pasar así de fácil — Respondió la dama gorda. Tenía dos opciones: Esperar a que Oliver saliera o que alguien entrara.

No mucho tiempo después, noté como se aproximaba cierto chico bastante conocido, al estar cercano a mi, el muchacho de anteojos me miró confundido, así que decidí hablar.

—Potter ¿No? — Era la primera vez que hablaba con él, pude notar sus ojos verdes. Solo asintió. — Buscaba a Oliver pero es obvio porque no puedo entrar, ¿Le puedes decir que salga? Por favor — Le pedí amablemente.

—Mmm, claro, aunque no hay problema con que entres. — Respondió Harry apresuradamente.

—Oh, sería buenísimo — Dije con sorpresa, no me esperaba aquella respuesta.

Y así, entré a la sala común de Gryffindor, la cual se encontraba llena y me hizo sentir un poco incómoda ya que recibía miradas confusas, agregando que había un poco de rivalidad entre ambas casas por la discordia de los dos campeones de Hogwarts, sin embargo, no eran palabras mayores, al menos para mí.

—Tranquila, ya le digo a Oliver que baje — Dijo Harry unos pasos adelante de mi, dirigiéndose a las escaleras, a lo mejor notó mi incomodidad.

Me senté en frente de la chimenea, mientras analizaba el lugar agradable, pero insisto, no le gana a nuestra sala común. Cerca de un minuto había pasado cuando escuché los pasos de alguien viniendo hacia mi.

—Julie, ¿Qué pasó? — No evité levantarme y darle un abrazo, por Merlín, necesitaba uno. Oliver respondió gustosamente, apretó su agarre y agregó un beso en mi cien.

—Solo...tuve un mal día — Dije separándome de él, intentando sacar una sonrisa en mi rostro.

—Soy todo oídos.

Me senté de nuevo junto a él y me dispuse a contarle todo lo ocurrido, desde la rabia con Nathan y sus antecedentes, pasando por lo contenta que me sentía con Cedric, y finalmente, lo triste que me había puesto al verlo con Cho por milésima vez, todo con lujo y detalle.

—No sé si me vas a disculpar, pero ese Mazzello es un idiota — Fue lo primero que respondió — Aunque bueno, ahora puedo presumir que gracias a mi, Nathan está celoso.

—Si, igualmente puedes presumir que por eso tengo un moretón en la muñeca. — Dije amargadamente.

—¡Lo siento! Es un logro para mi, a duras penas soy el Capitán de Quidditch — Lo fulminé con la mirada y el me rodeó con su brazo, acercándome a él —Te comprendo, bonita, no deberías prestarle más atención a Mazzello, se ve que está loco. Y bueno, Cedric...Cedric es otro tema — Concluyó en un suspiro.

—Ya no voy a ir con al baile con Nathan — Revelé.

—Es lógico, pero si nos vas con él ¿Con quién vas a ir?

—Oli, no quiero que pienses que eres mi segunda opción...

—Tercera opción — Interrumpió.

—¡Déjame terminar! — Reclamé — Me di cuenta que eres el único que merece ir conmigo, y fue muy estúpido de mi parte no pensarlo antes. Enserio, en este momento no me sentiría mejor con alguien si no fueras tú, ¿Quieres ir al baile conmigo?

—Que romántica, Ross. Si, iré al baile contigo — Sonreí — igual sabías que iba a decir que si, que manipuladora eres — No pude evitar reír y luego lo abracé de manera de agradecimiento.

—Lo siento, Oli — Dije en su hombro.

—¿Por qué, princesa? — Murmuró separándose del abrazo.

—Por ser así contigo, me siento mal por ello. — Dije lamentándome.

—Julie, si tuviera la oportunidad de estar con cualquiera de los dos chicos aparentemente más guapos de Hogwarts, creeme, no vería a más nadie igual — Comentó riendo al final.

—Gracias por ser tan comprensivo conmigo.

—Siempre.



Sala Común de Hufflepuff.
8:39 p.m.

—¿Por qué no me dijiste antes? — Le conté a Lauren lo que había ocurrido con Mazzello.

—Me sentía muy mal, no le quería contar a nadie.

—Pero a tu amorcito Cedric si, ¿no?

—Quizás debería olvidarme de él. — Dije pensativa luego de unos segundos.

—Ni tú te lo crees. Lo bueno es que ahora vas con Oliver, ¿Cierto? Yo sabía que terminarías con él — Cambió el tema de forma drástica.

—¿Qué, lo viste en adivinación? — Bromeé.

—¡Es el más tierno contigo! — Reí a causa de su comentario.

—Nathan me compró el vestido, creo que se puede enojar.

—Ese es su problema, además, es su culpa. Menos mal no soy tan linda, no tengo los problemas que tú tienes — Asentí a lo primero, pero lo segundo solo me hizo sonreír — ¿Le dijiste que ya no ibas con él?

—No creo que sea necesario, debe suponerlo.

—¿Y planeas hablar con él?

—Ni un poco.

Otro capítulo corto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Otro capítulo corto.

Tengo ganas de cambiar la portada de nuevo, pero luego en la historia tendría que editar los separadores para que hagan juego y que flojera.


Cambiaré la portada las veces que sean necesarias para salvar esta compañía.

ι'll вe waтcнιng yoυ »Cedric DiggoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora