Capricho de omega KookV

Plus II

Maratón 2/3
Segundo extra de esta serie!

<3

Hoseok silbaba alegre mientras ingresaba al estudio de baile. Era uno de esos días en que se había levantado con el pie derecho y sentía en cada centímetro de su ser que nada, absolutamente nada, podía arruinar su buen humor porque la suerte estaba de su lado y sonreír era el himno que merecían todas las horas. Jung Hoseok, señoras y señores, la alegría.

-Buenas...

Saludó a algunos de los miembros que ya se encontraban allí. Estaba dejando su bolso a un lado cuando oyó un gruñido. Dio un respingo a juego con el gritillo ahogado y se volteó rápidamente. Claro que para ése entonces la felicidad ya había abandonado su rostro, convirtiéndolo en una mueca bizarra de terror y sorpresa.

-Hola, hobi...

Su mejor amigo, el caótico Min Yoongi, le dedicó una sonrisa demasiado agradable para su rostro siempre serio. Hoseok paseó la mirada por el alfa, intentando encontrar algún indicio de molestia que hubiera hecho a su lobo gruñir, pero éste tenía las mejillas enrojecidas y la arruga a un lado de su boca era la que siempre se formaba cuando... bueno, cuando molestaba a alguien. El beta, entonces, reparó en la presencia de Jungkook, la víctima, junto al pálido.

En el suelo, envolviendo con brazos y piernas a un Taehyung de gesto aburrido pero asfixiado, el maknae de Bangtan le dirigía una mirada de muerte al alfa mayor, quien volvió a lo que estaba haciendo antes de que Hoseok llegara. Los dientes de Jungkook hacían aparición junto con un gruñido posesivo y sus manos apretaban más y más al omega.

-Mira ésto...- Dijo Yoongi con un gesto sádico que el beta no pudo ver por estar a sus espaldas. El mayor hizo un paso en dirección a Taehyung, apenas unos veinte centímetros, y en un amague, pues la mayoría del cuerpo estaba quieto, indicando que volvería a la posición inicial. Pero esa pequeña diferencia de espacio fue suficiente para que el menor volviera a reaccionar arrugando el gesto y gruñendo enfadado. Ésta vez el omega sintió que le comenzaba a faltar el aire; Jungkook lo iba a hacer desmayar si seguía acercándolo más y más a su pecho.

-Mio.

-¡Ay, pero qué mocoso!- La sonrisa no abandonaba el rostro del pálido.

-¿Y-Yoongi, por qué haces éso?

El nombrado se volteó hacia su mejor amigo. El gesto de sorna valía oro -¿Por qué no?

Y otra vez.

Y otra vez.

Y otra vez.

Y otra vez.

Y otra vez.

Yoongi simulaba acercarse y Jungkook gruñía. Sólo se calmaba cuando el mayor volvía a retroceder. Hoseok los miraba estático, sin estar seguro de si era interesante, gracioso o peligroso. Taehyung no hacía nada... excepto intentar respirar.

Todo terminó cuando Jimin llegó con los ojos adormilados pero lo suficientemente despierto para saber que su novio estaba comportándose como idiota. Una mirada fue suficiente para que el alfa mayor se parara recto, borrara su sonrisa y tragara seco con el peso de la culpa cayendo sobre su espalda. El omega alzó una ceja interrogativamente.

-Minnie... Hola, bebé.

Jimin dejó escapar una exhalación. Caminó frente a Yoongi y se acercó al par en el suelo. La sangre le hirvió en ira cuando vio que Jungkook comenzaba a tener los ojos llorosos. Estúpido Min, no debería molestar a un lobo cuando hace sólo unos días se emparejaba con su omega. Debería saberlo.