Capítulo 11

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A la mierda con estas mariposas que siento dentro cuando él esta cerca.
A la mierda con eso de que voy a cambiar.
A la mierda con Caitlin.
A la mierda con Justin.
A la mierda con todo.

Caminaba rápidamente atravesando el parque para poder llegar a mi casa, tirarme en mi cama y llorar. ¡Tenía que llegar ella y bajarme de mi nube! ¡Siempre ella!

Cuando Justin la saludó ella entró a su casa y susurrándole: "Hay algo que quiero hacer desde hace mucho" le dio un gran beso... Y aunque sé que Justin no la besó a ella... ¡Bien que recibió el beso gustoso! Pareciera que ambos se estuvieran comiendo con la boca... ¡AGH! No pude resistir ver esa situación y salí de la casa...

¿Para qué me quedaría?

Y se nota que Justin no notó que me fui por que ni siquiera salió por mi o me grito mi nombre... nada. O será porque en vez de tomar el camino más corto tomé el más largo.

¿Por qué intento buscarle una justificación? Tonta, tonta y tonta.

¿Y creíste que Justin se fijaría en ti? ¡Por favor! Él solo te habló porque te parecías a ella... Para él, yo solo seré una viva imagen de ella, nada más que eso. Suspiré y seguí caminando.

Perfecto. Todd, Neil e Ish estaban sentados en una banqueta del parque justo
por el camino en el que yo debería pasar. Levanté una mano para ponerme la capucha.

- ¡Jolle! - llamó Neil. Me terminé de poner la capucha y seguí caminando. Pasé por en
frente de la banqueta donde ellos estaban sentados. Sentí que alguien se paraba y
luego Todd estaba frente a mí impidiéndome el paso.

- ¿Nos vas a volver a ignorar? - por supuesto que... alto. Justin pudo rehacer su vida después de eso... ¿Por qué yo no? ¿Por qué me tengo que hundir en depresión de nuevo? Ya salí de eso. No voy a caer otra vez. No lo haré.

- Claro que no. Solo que no los había visto - le dije. Me bajé la capucha dejando que mis rizos estuvieran a la vista - ¿Qué hacen aquí?

- Ah... pues... pues... - mira a los chicos que estaban aún en la banca mirando para acá -. ¿A qué vinimos chicos?

- Creo que a... - dijo Neil. Los tres estaban mirándome como aunténticos babosos, y por rudo que suene... me gusta - ¿Para qué vinimos Ish?

- Pues... pues... - dijo mirándome. Son babosos de verdad.

- Ok entendí. Ya me voy, adiós - les dije e iba a empezar a caminar, pero Todd seguía delante mio. Pasé un mano por su cara - Tooodd, me tengo que ir - no me respondia -Ok, tu te lo buscaste - lo empujé a un lado y casi se cae.

- ¡Hey! - me dijo.

- Te avisé, pero no me hacias caso, ¿Qué iba a hacer, eh? Da igual - empecé a caminar.

- ¡Espera! - gritaron los tres al mismo tiempo, esto se esta poniendo incómodo, mucho.

- ¿Ahora qué? - dije y volteé, cruce mis brazos sobre mi pecho y los miré a los tres, uno por uno.

- ¿A dónde vas? - dijo Ish.

- ¿A... mi casa...? duh.

- Claro, claro. - respondio él.

- Ok... esto ya fue suficientemente raro. Me largo - me giré de nuevo.

- ¡Jolle! - grito alguien creo que fue Neil.

- Yo ya me fuí - dije y levanté mi mano en signo de amor y paz.

Caminé rapido hasta mi casa mirando el piso. Llegué hasta la entrada y empecé a andar por el pequeño caminito hasta las escaleras del porche de la casa, cuando estaba llegando pude distinguir unas zapatillas rojas. Subí la cabeza lentamente para encontrarme con Justin, sentado en las escaleras, mirándome fijamente. Alcé una ceja y las subí de lado, metí mi mano en mi bolsillo y... No tengo mis llaves, genial.

- ¿Buscas ésto? - dijo él, voltee y ví que sostenía mis llaves con una mano en alto.

- Si - y antes de que pudiera guardarlas se las quité y abrí la puerta. Entré y cerré la puerta detrás de mí. Dejé las llaves en una mesa que hay al costado de la puerta donde está el teléfono, la guía telefónica y la agenda de número de familia, etc.

Subí las escaleras corriendo hasta mi cuarto y al llegar me eché en mi cama de sopetón. Estúpido Justin.

No, estúpida yo por hacerme ilusiones que no debía. Por imaginarme un mundo donde yo le importara tanto a él como él a mi. Solo vino a entregarme mis llaves, ahora debe estar corriendo a casa de Baylee... Idiota.

Se escuchó un ruido por la parte baja de la casa. Me incorporé en la cama de golpe, ese sonido ya lo había oido antes. Salí de mi cuarto y bajé las escaleras para encontrarme con Justin a punto de subirlas.

- ¿Qué haces aquí? ¿Y cómo entraste? - no dijo nada y solo me enseñó un pedazo de cartón - Debí suponerlo.

- ____ yo... lo de Baylee...

- Justin déjalo. No tienes porque venir y darme explicaciones que no vienen al caso. Tú y yo somos... amigos, creo. Es ilógico que vengas e intentes disculparte cuando en realidad no haz echo nada - pasé por un lado de él y caminé hasta la puerta la abrí y con una mano en el picaporte miré a Justin - Será mejor que te vayas - señalé la puerta con la cabeza.

El caminó con la mirada en el piso hasta la puerta, al llegar me miró, parapadeé y de pronto, tenía a Justin a un centímetro de mi cara. Su aliento chocaba con el mío y sus ojos estaban viendo los míos.

Parpadeé de nuevo y ya tenía a sus labios presionando y moviéndose contra los míos.
Me perdí en ese momento, pero poco a poco empecé a mover mis labios al mismo ritmo que los de él... saqué mi mano de picaporte de la puerta -aún conciente de que esta esta abierta- y la puse en su mejilla; mientras que una de sus manos me tomaba de la parte de atrás de mi cintura haciendo que me eleve unos pocos centímetros más para alcanzar su tamaño y así facilitar el beso.

Se separó un momento y junto mi frente con la suya aún mirandome a los ojos y con la respiración levemente agitada igual que la mía.

- Baylee no me importa... solo me importas tú - dijo y volvió a presionar sus labios contra los míos. No tardé en devolverle el beso con la misma pasión y ternura con la que él lo hacía...

- Oh... uh... lo siento - dijeron a nuestras espaldas... esa voz.... es conocida.

... Y llegaste tú y todo cambió ❝j.b❞ #1| TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora