Taennie Shots》Septiembre

Teacher's pet.

"Sé que soy joven, pero soy muy madura para mi edad."

La señorita Jennie Kim cruzaba miradas con su maestro de matemática, Kim Taehyung. La menor le regalaba pequeñas sonrisas y el mayor le sonreía de igual manera. Nadie veía lo coqueta que era la castaña, todo porque ella se sentaba en la primera carpeta de la columna del centro. Consideraba que era un lugar estratégico, ya que, ahí podría ver de cerca a su amante, además de poder seducirlo sin que los demás alumnos se den cuenta.

Era la última clase del día, y, para la buena suerte de todos, era viernes. Jennie, de tan solo pensar que, terminada esta clase, iba a tener clases extracurriculares con el joven Taehyung, se emocionó.

Taehyung se sentó tras su escritorio, iba a revisar las pruebas de la semana pasada, pero se distrajo viendo a su alumna favorita.
Jennie se cruzó de piernas, dejando que su maestro viese un poco más sus muslos. Cabe decir que la falda de la chica le llegaba un poco más arriba de la rodilla.
Ambos conectaron miradas por enésima vez, la morena se mordió el labio inferior y seguido a esto, soltó una pequeña risa, solo audible para ella. Él, por su parte, sonrió y negó con la cabeza, devolviendo su mirada hacia los papeles que tenía enfrente.

Los minutos pasaron y Taehyung ya había repartido los exámenes de los estudiantes. Todos habían aprobado, menos dos personas. Jeon Somi y Jennie Kim.

La campana que anunciaba la salida sonó, haciendo que el alumnado aliste sus cosas dentro de sus mochilas y bolsos, todos con la ansiedad de llegar a sus casas y disfrutar del fin de semana.

—Jóvenes, las personas que hayan desaprobado, se quedan conmigo un par de minutos cuando el salón esté vacío. Los demás, tengan un buen fin de semana. — Dijo el pelinegro, yendo nuevamente hacia su escritorio, solo que estaba delante de este, apoyando su espalda contra la madera, esperando quedarse a solas con ambas alumnas.

Pasados tres minutos, las dos estudiantes se quedaron a solas con el adulto. Ambas se acercaron hacia el hombre de cabellos negros. Somi no le quitaba la mirada de encima y Jennie solo se dedicaba a sonreír.

—Señoritas, la próxima semana habrá un examen sustitutorio. Como sabrán, esta es la prueba mensual, por lo que pesa bastante en mi registro. No quiero reprobar a nadie a fin de año, por lo que les pediré que estudien. Señorita Jeon, en su examen le señalé los errores que tuvo y le coloqué la respectiva resolución, por favor, necesito que estudie mucho para su próxima prueba. Puede retirarse. — Dijo, mientras alejaba la vista de la chica nombrada anteriormente, fijándose ahora en su castaña favorita.

Pasado un minuto, escuchó el sonido de la puerta cerrándose, indicándole que se encontraba a solas con su pequeña amante. Caminó hacia donde estaba, sin apartar su mirada de los ojos de la contraria. Una vez estando cerca, la tomó de la cintura, acercándola hacia su cuerpo. La joven posó sus manos en los hombros del más grande, parpadeando varias veces y fingiendo inocencia.

—Bonita, estabas mejorando tus notas y tu promedio conmigo. ¿Qué pasó, hm? — Cuestionó el mayor, bajando su rostro y depositando un suave beso en los belfos de la fémina.

La chica correspondió aquel dulce y pequeño beso, y antes de finalizarlo, mordió y succionó levemente el labio inferior contrario. —Quería tener una excusa para poder seguir pasando mis tardes con usted, profesor. — Contestó una vez que se separaron, lamiendo sus propios labios. Adoraba besarse con su maestro.

—Eres tan linda, ¿lo sabías, uhm? — Lanzó una segunda pregunta, para retirar sus manos de la cintura ajena, tomando ahora las pequeñas manos de su acompañante, caminando y guiándola en el trayecto hacia la silla que estaba detrás del escritorio, donde se sentó él primero, y acto seguido, hizo que la menor se siente en sus piernas, posando una vez más sus manos en la cintura de ella.