Virgin Wanted ; hrj + ljn

Capítulo 6.

Notita.
Muchas gracias a los ojitos y estrellitas que se toman el tiempo de leer y esperan por los capítulos.

La verdad nunca pensé que estuviese haciendo esto bien, es mi primera adaptación por lo que fui cuidadosamente transcribiendo cada parrafo letra por letra.

Oficialmente hemos llegado a la mitad de la historia.

Muchas gracias por leer. Los próximos capitulos son los más interesantes, esten atentos.

♡

Eso no pudo haber sido justo, RenJun pensó mientras se marchaba del salón de clases, Jeno siguiéndolo de cerca por detrás, pero no tenía ganas de ser justo. Estaba cansado de idiotas como Kang tratando de traerlo abajo y, en ese momento, estaba furioso con toda la estirpe coreana.

Incluso aunque Jeno nunca había cuestionado abiertamente sus habilidades, parecía sorprendido cada vez que las mostraba.

TaeIl lo llamó mientras caminaba por su oficina. Ahora había un coreano, por lo menos, a quien no clasificaría con lo que Kang es en el mundo. Había demostrado ser de su confianza en su capacidad de tiempo y otra vez desde que lo contrató.

Miró dentro de su oficina.

-Hola, TaeIl. ¿Qué pasa?

-Necesito hablar contigo. -A la voz de TaeIl le faltaba su nota alegre de costumbre. Su expresión sombría picó a través de él. TaeIl gesticuló hacia la silla frente a su escritorio.

-Llevaré tus cosas. -Jeno tomó la mochila de su mano.

Apenas lo vio, aligeró la carga mientras entraba en la oficina de TaeIl, ahora llevando el peso de la aprehensión.

-¿Qué pasa, TaeIl? -preguntó.

-Jun, cierra la puerta, ¿podrías?

Tiró para cerrarla y, mientras hacía clic en su posición, la oficina parecía cerrarse en torno a él. Nunca se había dado cuenta de lo pequeña que era la habitación. Por supuesto, nunca había estado dentro con la puerta cerrada, tampoco. TaeIl corrió las cosas de una manera bastante casual. Las puertas cerradas no eran su estilo.

-Siéntate. -Gesticuló a una de las dos sillas de vinilo azul marino frente a su escritorio. A medida que se hundía en una, se inclinó hacia delante-. Odio hacer esto, Jun, de verdad.

Los músculos de su estómago se volvieron rígidos. Se inclinó hacia delante en la silla.

-Por el amor de Dios, ¿hacer qué?

Se acarició el mentón con un pulgar, sus dedos se curvaron sobre su barbilla.

-Esto es difícil para mi, Jun, así que déjame hacer esto a mi propio tiempo. -Cruzó las manos sobre el escritorio delante de él y tomó una respiración profunda-. Nos conocemos el uno al otro desde hace mucho tiempo. Sabes que creo en ti, y en tu destreza como artista.

Sus dedos se apretaron alrededor de los brazos de la silla.

-TaeIl, me estás poniendo muy nervioso.

-No haría esto si tuviera alguna otra opción.

Se contuvo de una repetición de su pregunta anterior, seguro que ya sabía la respuesta. Una respuesta que no quería enfrentar. Una respuesta que podría significar el fin de su sueño. Desafortunadamente, una vez que TaeIl llegará al punto, tendría que hacerle frente... y a su futuro.