Poemas escritos por la noche y el vino

Enséñame a amar

Quita la forma, el manual, el camino la escuela de los años y las reglas que yo mismo me puse creyendo saber amar

Enséñame a amar, que en tus pasos y tus lejanas caderas hay más razón que en mi propia cabeza, dejemos en la cajita las cosas que creí que eran verdad desde que era niño o un enamorado adolescente

Rompe las hojas con las líneas que escribieron las otras maestras y muéstrame que hay más formas de besar una herida que la que mis labios conocen hasta hoy

Despierta al príncipe azul y haz correr al guerrero, báñate desnuda de miedos con la sangre del dragón, haz que el poeta vea el mundo desde tu cúspide

Enséñame a amar, tápame los ojos y muéstrame la forma correcta de dirigirme hacia ti

En tu traslúcida apariencia de dama del romance te reto a decirme que estoy equivocado en mi forma de ver a las damiselas que se cruzan por mis sueños que buscan un caballero que resulto no ser yo

Te reto a gritarme en la cara vestida de cupido, de afrodita o de venus que mis escalas en corazones femeninos fueron solo juegos infantiles

Enséñame a amar y dale razón a mis sueños, a mis latidos, al calor de mi carne, que en las lecciones entre besos, caricias y damas en poemas y dibujos arrugados donde me calaron los huesos y el alma por tu culpa ya no sé si de verdad aprendí a amar...