Poseía

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Anoche vinieron a mi cama a buscarme los fantasmas de mis sueños pasados, aquellos sueños que protegía para ti cuando de noche todo estaba frio

Por razones de mal tiempo y de vientos huracanados se escaparon de donde los tenia, juntos a mis memorias en un pequeño lugar donde yacían encerradas

Eran posesiones póstumas a nuestro fallecido amor, de aquel futuro donde fui feliz, donde tú lo eras, donde los dos lo éramos o siendo un poco conformista al menos te reías

Yo poseía una cama donde dormías tu, 4 gatos, un perro algo viejo, una televisión, una hora de llegada a casa, un reloj sin cuerda donde no se nos iba el tiempo

Poseía una taza de café caliente, un sol que me desvelaba sin pedírselo, una paga que alcanzaba para las cuentas y de vez en cuando una rosa, un buen libro antes de dormir

Te tenía a ti despeinada en mis mañanas, un jardín con tus flores favoritas, un vaso de limonada en la tarde, un cajón con suficientes lápices de escribir

Poseía tu imagen maquillándote en mi espejo, un anillo en mi mano derecha, tu cabello en mi almohada, un guiso de pollo, tu ropa conversando con la mía en el armario

Todos eran fantasmas grises, crueles y fríos, pero el más frío, cruel y gris era aquel que repetía en silencio "poseía", porque tenía el nombre de ese pretérito imperfecto sin futuro ni esperanza que dejaste sin preguntarme si lo quería con ese adiós tuyo.

Poemas escritos por la noche y el vinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora