Frente a ti

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Tres meses, tres meses habían pasado desde la primera vez que la vi por la pantalla de mi computador

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Tres meses, tres meses habían pasado desde la primera vez que la vi por la pantalla de mi computador.

Durante esos tres meses había sentido cosas que no sentía en años.

Había días que nos quedábamos hablando toda la noche, eran más los días en los que hablábamos que los que jugábamos y para ser honestos seguía ganándome en los videojuegos.

Me había hablado de todo que parecía que la conociera de toda la vida pero yo... yo aún no le contaba de mi.

Mi salud solo iba de bajada como lo esperado.

Me había roto una pierna lo que me había obligado a usar un yeso que había ocultado con una cobija, había visto uno que otro de mis moretones pero le había podido mentir.

Habían días que me sentía mal por no decirle la verdad pero oír su voz sin un "¿Estás bien?" "¿Cómo te sientes?" era lo que necesitaba.

Esa noche hablaba con ella.

—Entonces una semana —dije abrumado.

—Así es, ¿Podrás vivir sin mi? —bromeó.

—Será difícil pero estoy seguro de que si —sonreí.

—Prometo que si mi padre no se pone tan terco te haré video llamado —prometió.

—La esperare —sonreí.

Ella se tuvo que ir pues tomaría un avión por la mañana.

Dormí toda la noche pues estaba verdaderamente cansado.

Odiaba la idea de no poder hacer una videollamada con Sam

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Odiaba la idea de no poder hacer una videollamada con Sam... pero sería aún mejor verlo en persona.

Durante los tres meses desde nuestra primer videollamada habíamos hablado y compartido tanto.

En una de esas pláticas le había hablado de lo mucho que ama a los Cotton Rocks, los deliciosos dulces que se habían descontinuado en mi país pero en el suyo seguían, unas semanas después tenía una caja llena de Cotton Rocks, eso y una dirección.

No More LivesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora