Grabadora 11: Propósito.
Varias noches pasaron desde aquel día obscuro en que la luz se esfumo de su ser dejando atrás tan solo un cuerpo sin vida pero que al mismo tiempo no estaba muerto. Tan solo una marioneta que seguía los comandos de un maestro infernal que no tiene forma ni cuerpo fijo, siempre en constante cambio con el paso de generación en generación, el ciclo de la muerte.
La sensación era algo extraña, su ojo izquierdo le mostraba un mundo diferente al que recordaba semanas atrás. El mundo en el que antes había vivido se esfumo tras una cortina de un color rojo liquido; El color rojo de la sangre inocente. Tan puro y tan vivo. Tan delicioso y tan amargo. Así era como Sebastián lo describió por primera vez. Hace unas horas lo había llevado a la ciudad para que viera las cosas desde su punto de vista y se topó con una realidad totalmente nueva.‘’Todos son impuros’’ Dijo Sebastián mientras estaba sentado junto con su creatura en una roca en la sima de la colina con perfecta vista a los edificios, casas y personas de su zona de caza. La ciudad. ‘’No importa como lo veas, las personas son como nosotros’’
‘’ ¿A qué te refieres?’’
Miller se mantenía a cierta distancia detrás de aquel chico quien sonreía como si fuera un infante mostrando su colección de juguetes a alguien nuevo. Las nubes danzaban al son del viento que movía sus ropajes y cabelleras, el frio le recordó al invierno que estaba por llegar. No estaba tranquilo en estar ahí teniendo una charla junto al asesino que tanto tiempo había estado persiguiendo pero tampoco se sentía con miedo, la creatura que había sujetado su mano, Su Creatura, yacía de pie a su derecha contemplando a su semejante de piel gris a lado de Sebastián.
‘’Tan solo piénsalo un poco. Las personas hacen únicamente lo que les es bueno para ellos mismos. Se alimentan de otros animales para sobrevivir y gastan los recursos de su hogar acercándolos cada vez más y más a su propio fin, no importa cuántas veces los intentes entrar en razón, las personas nunca entenderán hasta que tengan la soga de sus errores apretando su garganta. ‘’ Bajo la cabeza un poco y observo la palma de sus manos. ‘’No son diferentes a nosotros, Miller. Son perfectos demonios como nosotros, de hecho, son los únicos seres en este mundo que lo son. ‘’
‘’Ellos asesinan, roban, secuestran, aniquilan. La muerte los rodeara eternamente. Pero aun así todos pierden la cabeza cuando nosotros cumplimos con nuestro propósito. ’’ Hubo una pausa. ‘’Patéticos’’.‘’ ¿Llamas a esto ‘Propósito’? ¿Despedazar y asesinar a mano fría los seres queridos de los demás es un maldito propósito?’’
Miller, quien había estado pensando en Jeremy todo este tiempo no pudo contenerse, justo después de terminar la frase observo como la creatura de Sebastián giro bruscamente su cabeza y ahora lo miraba fijamente con sus ojos de un negro profundo y sin pupilas aumentando la tensión en el ambiente conforme Sebastián soltaba una pequeña risa característica de el y tomo una pequeña libreta junto con un bolígrafo decorado con engravados de calaveras de su bolsillo y los contemplo por unos segundos.
‘’ ¿Qué día es hoy?’’ Pregunto el ignorando su pregunta. ‘’He perdido la cuenta’’
No había pensado en eso antes. Si su memoria no le fallaba…
‘’18 de Julio’’
Sebastián bajo la cabeza, su creatura en cambio, sonrió.
Lo que escucharía a continuación fue el comienzo de todo. El chico abrió la libreta y hojeo de manera rápida hasta llegar a la página más reciente.
‘’31 de Octubre’’
‘’ ¿Qué?’’
‘’No espero que recuerdes lo que paso hace meses, pero después de aquel día, 18 de Junio, por fin viste a tu creatura y con esto no solo te volviste uno de nosotros sino que entraste en un trance de demencia del cual no puedes escapar.’’ Se puso de pie y camino a paso lento mientras hojeaba la libreta.
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Demencia.
HorrorUna cabaña. Un bosque. Un lago. Un chico aburrido y sus padres en vacaciones. ¿Qué puede salir mal? O al menos eso es lo que pensó. Sebastian Elerick es culpado de haber cometido homicidio múltiple después de unos sucesos que nadie logra comprender...