Grabador 8: La creatura
3 SEMANAS DESPUES
''Buenas noches, televidentes, bienvenidos una vez mas y gracias por escogernos como su programa de preferencia aquí en el canal 67 donde; La verdad está al alcance de la mano. Esta noche les tenemos preparada una noticia impactante y, que seguramente, ha estado en boca de todos desde hace dos meses cuando los primeros casos bizarros comenzaron a surgir en la ciudad de... [Estática] ''
''-gicos accidentes han estado ocurriendo desde el pasado mes de Junio, las autoridades no quieren dar respuestas sobre esto pero se sabe que el presunto culpable de los homicidios es este chico: Sebastián Elrick. Este chico podrá parecer inofensivo, ¿quien los culpa por pensar así?, pero en realidad es el presunto culpable del primer homicidio que se dio a las afueras de... [Estática] ‘‘
‘‘¿Asesinatos bizarros? ¿Demonios? Esto no puede ser obra de un ser humano, damas y caballeros, ¿quien es capaz de cometer canibalismo con los cuerpos de sus propios padres? Las muertes que han ocurrido son trágicas y las condiciones en que se encuentran los cuerpos no son nada agradables; Esqueletos con pedazos de piel restantes, intestinos destruidos por lo que parecen ser marcas de dientes e incluso pedazos de cerebro masticados tirados por doquier. Esto no es obra de un humano... [Estática] ‘‘
Galileo continuaba cambiando el canal de la televisión de su oficina usando el pequeño control remoto de color negro que tenía en sus manos mientras se recargaba en la silla de su escritorio sin poder tan siquiera tomar el café que uno de los miembros del cuerpo del F.B.I le había entregado gusto antes de dejarlo solo en las instalaciones. Era de noche y la luna brillaba atreves de su ventana, estaba esperando a que la persona que él esperaba ver apareciera con lo que le había pedido...pero eso había sido desde hace una hora. Sus manos estaban temblorosas y su cabeza estaba empapada de sudor a pesar de tener el aire artificial encendido lo más bajo que pudo. No sentía frio, no sentía calor, más bien sentía nauseas, mareos, con función y terror...todo al mismo tiempo y no podía explicar el por qué. Más bien, no quería hacerlo.
''Lo he visto...merodeando por las sombras de la noche arrastrando lo que parecía ser un perro de buen tamaño partido por la mitad dejando un camino de sangre con sus intestinos a su paso. S-sus ojos brillaban de un rojo intenso y por alguna razón el solo me miro desde la calle, yo estaba en el segundo piso de mi casa observando por la ventana de mi cuarto, y pude presenciar una curva blanca con manchas rojas formándose en su rostro... Joder, aun siento un escalofrió recorrer mi cuerpo cada vez que lo pienso... [Estática] ‘‘
TAP TAP
Unos ligeros golpes, provenientes del otro lado de la puerta de madera de su oficina, fueron audibles incluso con el alto volumen del televisor. Al momento de escucharlos salió de su transe y presiono con fuerza el botón del control disminuyendo el volumen. Observo su escritorio, todo estaba en orden.
‘‘¡P-pase!'' Galileo dejo escapar un grito mientras se acomodaba su corbata y se limpiaba el sudor de su frente con la manga.
La puerta se abrió revelando a un hombre joven con un buen peinado y un poco de barba que hacia resaltar su sonrisa de alguna forma. Sus ojos eran de color negro al igual que su cabello, algunas veces Galileo se perdía en un abismo eterno cuando observaba fijamente a aquel hombre. Wold. El compañero de Miller.
''Jefe, tengo lo que me pidió. ‘‘Anuncio Wold agitando un montón de hojas en el aire que estaba sujetando con su mano. Dio un paso adentro de la oficina y cerró la puerta detrás de el usando su pie. Las pisadas que dio resonaron más alto de lo que había esperado.
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Demencia.
TerrorUna cabaña. Un bosque. Un lago. Un chico aburrido y sus padres en vacaciones. ¿Qué puede salir mal? O al menos eso es lo que pensó. Sebastian Elerick es culpado de haber cometido homicidio múltiple después de unos sucesos que nadie logra comprender...