Encuentro

652 27 0
                                    

¿Por que siempre tengo que enamorarme de chicos a los que no puedo alcanzar?

Perdón supongo que no sabéis de que estoy hablando así que empezaré por el principio.

Todo pasó una noche de luna llena en la que regresaba de mis prácticas de violín, serían más o menos las 21:00, y él allí estaba, volando por el brillante cielo nocturno.

Una vez llegué a casa me estuve preguntando toda la noche quien sería ese chico de cabellos plateados que sobrevolaba el cielo, y que si alguna vez volvería a verlo.

La noche pasó y a esta le siguió la mañana, en la cual mi despertador sonó. Me preparé para ir al instituto, y de pronto el timbre sonó.

-¿Si?
-¡Mei!
-¿Yukito?
-Tenemos turno de limpieza, llegaremos tarde.
-Un momento, enseguida salgo.

Él es Yukito Tsukishiro mi amigo de la infancia y mi vecino. Hemos estado juntos des de... desde siempre y siempre le cuento todo lo emocionante que ocurre en mi vida, es decir de los chicos de los que me enamoro...

-¡Mei! ¡Si no te das prisa me voy sin ti!
-¡Solo tardo un minuto, espera por favor!

Salí de casa medio corriendo y los dos nos pusimos en camino hacia el instituto, por el camino aproveche la oportunidad para empezar a contarle lo que me había pasado.

-Y bien, ¿sabes algo más de ese chico que surcaba los cielos? Es mas, ¿estas segura que era un chico? Podría ser una chica o un sueño.
-Yuki, estoy segura que era real.
-Bueno si tu lo dices supongo que te tendré que creer.

El día paso sin ningún incidente, pero cuando estaba volviendo a mi casa, me lo volví a encontrar en el cielo.
Esta vez decidí que por lo menos lo saludaría, así que decidida empecé a seguirlo hasta que su vuelo cesó.
Se había posado sobre el torii de un templo, y decidida lo llame.

-¡Hola chico alado! Me llamo Mia un placer conocerte.

Sus ojos se fijaron en mi, y por mi cuerpo pude sentir como si electricidad lo recorriera de extremo a extremo, pero él no me respondió y volvió a apartar la mirada.

-Vamos por favor, dime como te llamas.
-Yue

Respondió sin dejar de mirar a la luna, satisfecha por el momento decidí no molestarlo mas y me marche a casa.

CONTINUARÁ...

Amor sin precedentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora