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Tirando la manzana al cesto, RenJun recogió su mochila y se levantó de la mesa, dejando todo el desayuno en dónde no debía estar.

—¿Ese no es la perra que se acostó con Wong YukHei?.— escuchó decir cuando caminaba por lo pasillos. Muchos lo miraban con envidia, pues supuestamente había tocado a el chino más sexy de la clase mayor.

Movió su flequillo con sensualidad cuando Lee Know pasó por su lado, ese joven sería su próxima víctima. Comentarios como “Huang RenJun lo tiene todo, ¿Por qué no nos deja un chico a nosotros?” llegaban a sus oídos, haciéndolo reír.

—¡RenJun!.— conocía ese grito. Dándose la vuelta, pudo ver a su mejor amigo Donghyuck correr hacia a él. El flequillo del pelinegro se movía a medida de que sus piernas tocaban el piso, su mochila le colgaba de un hombro y sus ojos venían en dos lunas por su sonrisa gigante.

—Hola, Donghyuck.— saludó. El chico se paró un poco, colocando sus manos en sus rodillas y respirando por el esfuerzo de correr hasta él.

—RenJun, ¿Por qué no me dijiste que te habías ido?, ¡Pasé por tu departamento y no saliste!.— gritó eufórico el joven moreno.

—No es para tanto, solo llegué dos minutos antes, no te vuelvas loco.— Ambos chicos empezaron su camino a su sala correspondiente, mientras conversaban de cosas triviales y sin sentido.

Ninguno tocaba el tema, ambos sabían que no tenía importancia.

—RenJun, ¿Por qué solo somos nosotros?, Hoy ChenLe no llegó.— Donghyuck miró preocupado a su amigo.

—Ayer Jisung estaba enojado, realmente no sé cómo debió pasarlo. Tú sabes cómo es Park cuando se enoja.— Donghyuck miró con pena el asiento de su amigo. Ambos se sentaron, sacando sus cosas.

Donghyuck se sentaba justo detrás de RenJun, por lo cual le gustaba golpearlo con papeles o molestarle el pelo, ya era costumbre.

—Deja de hacer eso, o te meto una mano por el ano.— soltó de repente, pues el moreno le acariciaba el pelo con nerviosismo.

—Sabes que me gustaría que lo hicieras, apesar de que a ti también te gusta por detrás.— esas palabras hicieron sonrojar al joven, quién solo miró su mesa.

—Cállate, ¿Bueno?.— fue lo último que dijo RenJun, porque el profesor entró a la sala.

—Pss.— escuchó de su lado. Se dió un poco la vuelta y vió a ChangBin, un chico de su clase. Este tipo le guiñaba el ojo y le mostraba dinero, RenJun solo sonrió, para darse la vuelta incómodo.

—¡Buenos días!.— saludó feliz él hombre, el profesor estaba entusiasmado de hacerle clases a la educación media, ya que siempre le hizo a los menores, como a los niños de 13, 12, 11 y así hacia abajo.

—Hola..— respondieron los jóvenes, cayendo en depresión al ver el grosor del libro estudiantil de matemáticas.

—Bueno, yo soy nuevo, hoy e llegado porque me dijieron que la otra profesora renunció, yo estoy feliz de trabajar con ustedes.— sonrió.— No soy el único nuevo, hoy también traje conmigo un joven que participará con nosotros en las clases, él es Na JaeMin.— un chico de cabello castaño entró a la sala.

Todos creyeron de inmediato que el chico era un tipo de esos que se drogaban, salía a fiestas y así (bien a lo Go <3). Pues el chico estaba parado frente a ellos con el cabello revuelto, un dulce de paleta en la boca, olía a drogas y llevaba una pequeña navaja que sobre salía en su bolsillo delantero.

Según RenJun, todo JaeMin apestaba a sensualidad.

—¿Presentémonos?, Bueno.— el profesor se sentó en su escritorio mientras JaeMin seguía estando con la misma mirada indiferente frente a los nuevos compañeros.—Yo soy Bae Jin Young y me gusta mucho leer, ahora di quién eres tú y que te gusta, para que luego vallan diciéndolo los demás.—

—Hola soy JaeMin, y me gustan los anos.— el castaño sonrió, mirando a sus compañeros, estos le veían con asombro, junto al profesor.

—No, no. Debes decir cosas como lo que te gusta hacer a menudo.— Jin Young sonrió.

—Me gusta tener sexo con chicos a los que les gusta ser azotados.— volvió a decir levantando los hombros.

RenJun rió por lo bajo y Donghyuck estaba que se le salía un pulmón por aguantar tanto su risa.

—Vamos, JaeMin, no es tan difícil, así mira, “me gusta comer fruta”, fin.— dijo la autoridad haciendo comillas con sus manos.

—Me gusta comer anos.— terminó otra vez.

—Okey, dejemoslo ahí.— JinYoung apuntó a una joven, la cual dijo su nombre y su gusto.

JaeMin se sentó en frente, casi a el lado del profesor. Todos sabían de que el chico tenía “onda”, así que rápido comenzaron a hablarle, sin saber que JaeMin era de la pobla y se juntaba con los Brayans de cursos más altos.

—Su turno, el joven de cabellos claros.— el hombre mayor apuntó a RenJun, quién sonrió.

JaeMin estaba concentrado tratando de mirar como sacarle la tinta a un lápiz, para así poder lanzar papeles con saliva por ahí. Porque aunque fuera inmaduro, a JaeMin le gustaba molestar.

—Hola, yo soy Huang RenJun y me gusta mucho cantar.— la voz dulce del chino llegó a los oídos del nuevo en clase.

JaeMin sintió unas ganas tremendas de lanzarse encima de RenJun cuando lo vió. Aquel chico era bajito, de físico delgado, una piel clara como el agua, piernas delgadas y medianas, sus ojos eran castaños al igual que su cabello.

—¿Como dijiste que te llamabas?.— preguntó, ya que no escuchó por estarlo mirando mucho.

—Oh, mi nombre es Huang RenJun.— “la perra” se escuchó en el fondo del salón.

—¿Te gustan lo hombres fuertes que azotan?.— Jin Young se sonrojó mucho ante las palabras del nuevo, por lo que se inclinó en su escritorio para ver como terminaba esa escena.

—¿Me preguntas si me gustas?.— RenJun estaba sonrojado. Tenía una sonrisa pícara y un sonrojo muy notorio sobre sus pómulos.

—Y si quieres tener sexo conmigo.— RenJun rió por lo sincero que era el castaño nuevo en la sala.

Solo tomó asiento, pero sentía como la mirada del nuevo le hacía hoyos sobre la cabeza. JaeMin, en el transcurso de la clase, le lanzó muchos papeles, todos con claras insinuaciones.

Y ahí empezaba el juego ¿Verdad?.

Game | JaeJunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora