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El vuelo a Nueva York había llegado cerca de las siete de la noche y observar la ciudad completamente iluminada era absolutamente perfecto. Tomaron un taxi y Alai no paraba de mirar por la ventana maravillada. Le encantaba aquella ciudad, adoraba los rascacielos alzarse sobre las avenidos, la gente con abrigos y un café en su mano caminando por las aceras.

― Esta ciudad en la noche parece tener aún más vida ― susurro Gia maravillada.

Al llegar al hotel Alai no tuvo problema en compartir habitación Gia, de hecho, lo deseaba, al entrar a su habitación desempacaron lo más rápido que pudieron ya que deseaban salir.

Salieron del hotel y comenzaron a caminar observando las tiendas, los lugares de comida aun abiertos y la gente caminando alrededor. Se quedarían cerca de Central Park y estaban maravilladas con la ciudad.

― Esta delicioso ― murmuraba Gia ― vamos pruébalo.

― Es el segundo perrito caliente que te comes ― sonrió.

― Lo se está delicioso llevare otro ― camino de nuevo hacia el puesto.

Alai solo sonrió, le encantaba verla tan feliz, tan animada y sentía que en aquel lugar podía ser libre, ni siquiera se había despedido de Nancy o de su madre, tan solo había tomado el vuelo y no quería mirar atrás, estaba en una ciudad diferente tan llamativa y emocionante que no quería seguir pensando en lo que la atormentaba.

― Una vez vine con Sophie y mamá acá, deberías haber visto sus caras, Sophie comió pizza y hamburguesas como si no hubiera mañana

― Amo a tu familia, son adorables.

― Y ellas te aman a ti, sabes que mamá te adora.

― ¿Así que me adora?

― Mucho, cuando le dije que vendría contigo me pidió que te cuidara mucho ...

― Hasta ahora lo estás haciendo muy bien ― sonrió tomando de la chaqueta a Gia para acercarla a su cuerpo ― muy, muy bien.

...

A la mañana siguiente Gia debería ir a arreglar algunos asuntos respecto a su carrera, su agente la esperaría en un restaurante cerca de su hotel. Al parecer tenía buenas propuestas y estaba ansiosa de escucharlo.

― Bella como siempre ― sonrió.

― Hola John me alegra verte ― se acercó a abrazarlo.

― Y yo a ti, bueno están lloviendo propuestas Gia, claro que te he traído las mejores, la primera es otra película es de suspenso creo que te vendría bien probar un nuevo género de películas, sin embargo, también te quieren para una mini serie, el guion es fantástico y mezcla drama y misterio, te lo he traído para que lo revises cuanto antes.

― Oh por dios se ve fantástico, un reto sin lugar a dudas

― Pero uno de los buenos Gia, lee con calma las propuestas si tienes dudas por favor avísame y nos vemos en unos días para firmar tu nuevo contrato ― le sonrió.

― Gracias ― asintió mirando los sobres sobre la mesa ― ¿Dónde serían las grabaciones?

― La película se grabará en Londres por unos cuatro o cinco meses, la mini serie seria en Australia y algunos lugares de Asia.

― Vaya ― murmuro

― Lo sé, te esperan viajes alrededor de mundo querida felicitaciones.

Eran propuestas interesantes, cualquiera que fuera su elección tendría meses agitados por delante, pero lo que más le preocupaba era que haría, en cualquier caso, debería alejarse de Alai.

Jardín de MargaritasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora