Jardín de Margaritas

25

Después de aquel incidente y de que solo les quedaban dos días en Nueva York, habían decidido regresar antes de lo planeado debido a los acontecimientos, por otro lado, Alai tuvo que reunirse con Nancy y el productor de la serie para la que la querían, no tenía ni idea de si aquellas fotos afectarían su percepción de ella, tampoco había hablado demasiado con Nancy, tan solo se había refugiado en Gia.

Su madre era otro asunto, había gritado mucho, casi no podía recordar demasiado de lo que había dicho, pero debía entender, se había enterado de su relación por las noticias, vaya sorpresa, pero aun así había sucedido de nuevo, palabras hirientes y cientos de recordatorios de que iría al infierno, bueno en ese momento vivía su propio infierno.

― Al menos estás viva ― dijo Nancy al verla llegar.

― Si bueno, sigo aquí.

― Odio que desaparezcas si hay un problema me llamas y lo solucionamos, pero no huyes con tu novia y no contestas los mensajes.

― No es mi novia.

― Lo será, en fin, tenemos que reunirnos con Patrick, es el productor que te quiere, por cierto, me llamo ayer dice que no le importan los chismes de basurero, sus palabras no mías.

― Por lo menos una buena noticia.

― Es grandioso, vienen cosas buenas por favor no te hundas.

El edificio era imponente las habían citado en el piso 22 de aquel enorme rascacielos, desde allí se podía observar casi todo a su alrededor era asombroso.

― Pasen por favor

Alai y Nancy avanzaron hasta la oficina. Había llegado el momento, aquella entrevista podía llevarla al siguiente nivel o quizás hundirla.

...

Gia se había quedado en el hotel, no habían salido mucho después de aquel incidente y realmente estaba preocupada ¿Qué sucedería si aquello afectaba la carrera de Alai? No, no lo iba a permitir, estaba agotada tratando de pensar en una solución, pero realmente no la había, dijera lo que dijera las seguirían juzgando, solo tenían que esperar y dejar que todo pasara.

― ¿Y qué has pensado?

― Pues mi mente ha estado en Alai realmente ― decía mientras caminaba por la habitación.

― Entiendo, pero es una oportunidad única Gia. No insistiría si no pensara que esto sería bueno para ti ― acotaba su agente.

― Lo sé, lo se demonios claro que lo hare.

― Arreglare todo, habla con Alai, son jóvenes por el amor de dios Gia ahora es cien veces más sencillo mantener la comunicación con alguien al otro lado del mundo.

― ¿Y si la quiero abrazar?

― Te comprare un jet privado para que viajes, pero hazlo Gia piensa en todo lo que se viene y en lo que tu carrera ahora necesita.

― Quiero hacer la miniserie hay más oportunidades de que quieran una nueva temporada y continuar trabajando. Quiero hacerlo.

Entrada la noche Gia se despidió de su agente y decidió preparar algo para Alai, hablo con el restaurante del hotel para que arreglaran un pequeño espacio para ambas.

Realmente necesitaba decirle todo, también si existía un futuro o quizás ese era el fin de todo, lo admitía habían sido días increíbles a su lado, claro exceptuando aquellos paparazis y las fotos publicadas, pero realmente le había mostrado a Alai que podían hacerlo, que podían estar juntas.

La cena estaba servida, había puesto varias flores y la luz tenue iluminaba la habitación, así mismo la hermosa vista frente a ella de Nueva York la hacía sentir tranquila.