El Diario De Kirito y Asuna

El Plan

Día 04

—Muy bien, la reservación es para hoy a las 7, si, gracias. Perfecto.

Dijo Kazuto colgando su celular luego de haber pedido una mesa en el mejor restaurante de la ciudad, todo iba saliendo a la perfección, esa noche había planeado algo especial para su amada novia, su plan consistía en ir a pasear con ella al parque, luego ir a ver una película, después ir cenar, y por último una sorpresa especial para la que estuvo ahorrando durante todo el tiempo que estuvo trabajando para Kikouka.

Eran aproximadamente las 2 de la tarde, apenas disponía de un par de horas para prepararse y asegurarse de que todo fuera a salir a la perfección. Para poder relajarse un poco decidió ir a bañarse, el agua caliente lograba calmar sus nervios, una vez salió del baño busco su mejor mudada, una vez se vio listo se dispuso a salir en busca de su novia, salió de su casa, se subió en su moto y emprendió en su viajé.

Dilato al rededor de 20 minutos para llegar a su casa, una vez estuvo en frente de está el portón se abrió permitiéndole el paso, se bajó de su moto y se adentro en la imponente mansión de los Yuuki.

—Buenas tardes joven, la señorita Yuuki lo espera adentro.

Habló la dama de llaves quien con una sonrisa lo recibía, él con una pequeña reverencia correspondió el saludo y se adentro en la mansión, no fue mucho lo que caminó cuando divisó la melena de fuego de su amada novia, a paso lento se acercó a ella tratando de evitar que lo escuchará, una vez estuvo lo suficientemente cerca tapó sus ojos con ambas manos.

—¿Kirito-kun?

Soltó una pequeña risa para luego darle vuelta y encontrarse con su hermosa mirada, se quedó hipnotizado viéndola a los ojos y al parecer ella también al conectar su mirada con la de él, pasaron así por casi un minuto hasta que Kazuto decidió romper el hielo.

—Te ves hermosa.

Dijo mientras miraba el vestido que lucía Asuna.

—Y tú te ves bien guapo.

Soltó ella mientras miraba el traje que vestía Kazuto.

—¿Nos vamos?

—Si.

—Espero que le hayas dicho a tus padres que no vas a regresar está noche, porque no pienso alejarme de ti durante las próximas 24 horas.

—Kirito-kun.

Dijo ella totalmente apenada ante el comentario de su novio, aunque internamente saltaba de alegría ante sus palabras.

Salieron de la mansión y se dirigieron hacia su primer destino, el parque central donde habían tenido una cita antes del incidente de GGO, era un lugar hermoso, el aire era perfumado por los cerezos que estaban cargados de bellas flores, y más el color del atardecer era una vista que muy pocas veces se podía disfrutar.

—Recuerdo la última vez, que vinimos aquí.

—Si, ese día me preguntaste que era lo que quería hacer en el futuro.

—Recuerdo que me dijiste que querías seguir con la tecnología de inmersión total, que querías pasar de jugador a desarrollador.

—Si, lo eh estado pensando mucho y realmente creo que va a ser necesario ese viaje.

—¿A América?

—Si, Asuna, tengo algo que preguntarte.

Ella le miro atenta a lo que le fuera a decir.

—Si decidiera irme a América, tú, ¿Vendrías conmigo?

Disparo esa pregunta que lo había atormentado desde que la idea del viaje entró en su cabeza, el silencio se mantuvo por un par de segundos que para él fueron eternos mientras esperaba la respuesta de ella.