Capítulo 10

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Gun caminó detrás de Off todo el rato que les llevó llegar a su camioneta, los dos iban callados, pero Gun iba con el alma en un hilo debido a todo lo que había pasado, sobre todo por qué tenía miedo de que todos su planes se hubiesen echado a bajo.

El pequeño estaba demasiado pensativo que no se percató de que había llegado a la camioneta del diamante, se dió cuenta hasta que Off paró e hizo que su frente se pegará con su espalda.

Off: ... -frenó y no dijo nada, luego de unos segundos, habló- sabes algo que yo no sé, ¿cierto?

Gun no dijo nada, más bien no supo que decir.

Off: pero no solo tú, sino mis hermanos también... -su voz era neutra, no mostraba indicios de enojo o tristeza o cualquier otro sentimiento-

Uno de los guardaespaldas que se encontraban a los costados le abrió la puerta a Off, el sacó el maletín por el que Dante había mandado días antes y se lo entregó en las manos al pequeño, luego sin decir nada más, dió un beso en los labios a Gun sin temer que alguien más los viera.

Le dedicó una media sonrisa y cerró la puerta, indicándole al chófer salir del lugar y dejando a un pequeño completamente confundido.

Narra Elena

Tay me llevó al cuarto en dónde en un inicio, la verdad se había revelado. Su cuarto.
Me indicó que ropa tomar de el armario y bañarme. Dijo que utilizara la bañera puesto que había sido un día muy largo para mí y quería que me sintiera mejor. Mientras ordenaba mis cosas para asearme, el se metió al baño a preparar lo antes dicho. Tomé asiento en la cama y fijé mi mirada hacia el piso, pensando en la nada. Pocos minutos después Tay apareció a mi lado, indicándome que ya podía meterme al baño.

Elena: Dime algo Tay... ¿A ti también te gustan los hombres?

Tay: -su pregunta lo tomó por sorpresa, así que no sabía que contestarle- ¿Por qué esa pregunta, Elena? -tomó asiento a un costado de ella-

Elena: -levantó un poco la comisura de sus labios y musitó- tienes ropa algo grande para ti, y no de tu estilo -giró su cabeza para mirarlo y le dedicó una sonrisa leve- además, escuché tu conversación con....-cerró los ojos y evitó decir el nombre de el hermano mentiroso- esa persona. Sobre un chico al que proteges mucho. -le dió un leve codazo a su hermano-

Tay: -Tay se sonrojó al escuchar las palabras de Elena, y se apenó aún más, porque efectivamente, la ropa de su armario no le pertenecía, pero tampoco era de New, sino de Joss.- ¿Te molesto?

Elena: ¿Por qué? ¿Por amar y proteger a la persona que te gusta? -colocó su mano sobre la de Tay y negó con una sonrisa- por supuesto que no, cada quien es libre de ser lo que más deseé

Tay: me alegra escuchar eso. Eso significa que la vida te dió una buena familia -subió su mano a la altura de su rostro y colocó un mechón detrás de su oreja- ahora nos tienes a nosotros, bueno, a mí y a Off cuando sepa la verdad.

Elena sonrió y asintió, luego tomó sus cosas y se metió al baño, tomándose su tiempo para relajarse y limpiarse todas las impurezas que había dejado este agitado día.

Narra Tay

Este día era seguramente el que siempre recordaría como el más estresante, bueno, tal vez el segundo si contamos el día en que lo separaron de su familia.

Elena se metió al baño y eso le dió oportunidad de aflojarse la corbata, quitarse los zapatos y ponerse ropa más cómoda. Revisó su armario y se dio cuenta de lo que Elena comentó, varía prendas que tenía guardadas no eran de el, pero es que eran tantas las veces que Joss venía a verlo que el sinvergüenza trajo varias mudas de ropa propias para no tener que molestarse en cada visita. Todavía lo recordaba, recordaba todas las visitas que le hacía hasta que el niñato se declaró "heterosexual" y lo dejó por una rubia extranjera. Fue ahí cuando entró en depresión, se convirtió en un descarado que tenía sexo con cualquiera y cambió su rol por el activo. En esos tiempos su estatus como diamante aumentó en popularidad y todos los hombres u mujeres deseaban trabajar para el.

Fue un cínico hasta que lo vió por primera vez. Ese chico cuya blanca piel lo atrajo demasiado. Fue tan amable con el, aún que en ese entonces el diamante se había metido en una pelea callejera por así decirlo, y tenía toda la cara ensangrientada, por eso New no lo recuerda y a consecuencia, no sabe por qué Tay es tan amable con el.

Continuará...

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