Capítulo 14

122 10 0
                                    

Narra Elena

Después de tratar de convencerlo durante todo el desayuno, Tay permitió a Elena diambular por su bar mientras el revisaba los pendientes que tenía.

El lugar por el que empezó Elena fue la planta alta del lugar. El edificio contaba con una sección aparte en donde Tay tenía un espacio que podría ser llamado "departamento" para él. Contó las habitaciones existentes, exactamente 3, así que Elena supuso que eran las habitaciones de los demás diamantes cuando se llegaban a quedar con Tay.

Prefirió no indagar ahí así que bajó a dónde estaba el Bar y recorrió las instalaciones de este. Contaba con salas VIP, casino, pista de baile,  balcones adornados muy elegante, karaoke, en fin, era el bar más exuberante que había visto en su vida pero no se comparó con lo que vió al llegar al sótano. El lugar estaba exclusivamente diseñado para sus trabajadores, tenían canchas (no tan grandes) baños muy bien equipados, casilleros enormes, cocina, salas y muchas cosas mas que le hicieron entender a Elena el por qué era tan cotizado ese Bar...

Elena: Hablando de Bar, ¿No sé supone que New trabaja aquí? -habló al aire, recordando aquella noche en qué New visitó su casa para decirle que había visto a Gun en su lugar de trabajo- Surat Thani ... Aquí viajaba New desde la universidad para trabajar, lo recuerdo... Pero ¿En donde está? Bueno más bien ¿En donde está todo el personal que vi ayer?

Elena observó a sus al rededores pero no vió absolutamente a nadie, siguió explorando el lugar pero no había ni un alma por ahí. Rascó su nuca y suspiró, luego decidió dejarlo por la paz y subir a la habitación de Tay para ver si él se encontraba en el lugar.

Al llegar a la habitación escuchó ruidos provinientes de ella, así que supuso que Tay si se encontraba ahí.

Elena: Oye cuasi hermano, ¿El día de hoy es festivo? No hay nadie en tu... - abrió la puerta del cuarto y calló inmediatamente al ver en la cama dos cuerpos, cubiertos solo la mitad de ellos por una manta- ¡Oh cielos! No pienso volver a dormir ahí -tapó sus ojos inmediatamente, sorprendiéndose ante aquella imágen-

Narra New
Para ser poco el tiempo que tuvimos, Tay hizo de casi todo, claro, a mí parecer. Terminamos jugueteando y tocando nos en su cama, el placer que había logrado sentir no se comparaba con aquellos recuerdos que llegaban con mucha vergüenza a mi cabeza. El definitivamente me hacía sentir deseado hasta por la más mínima mirada.

Tay: ¿Aceptaras salir conmigo? - encimo mi cuerpo en el suyo, acariciando con sus pulgares mi cadera-

New: Creo que nos estamos saltando un pasó ¿No? -mi rostro enrojeció al ver la expresión de mi jefea, así que aparté la mirada de él-

Tay: por dios -rió- nos estamos saltando mil y un pasos ¿Que más tengo que hacer para que te fijes en mi? -subió una de sus manos a mi rostro y lo acarició con la mayor ternura que pude haber sentido-

New: te agradecería que no me hicieras sentir incómodo con mis compañeros por tener demasiada atención del jefe. Ya han preguntado si falta poco para que me saques de pobre -reí recordando todas las reuniones después del trabajo-

Tay: ¿Lo quieres? Considerando tu personalidad, por lo que he observado, creí que estarías enojado por eso, pero si es lo que quieres mañana mismo te instalo en mi departamento y te hago mi esposa -posicionó ambas manos en sus glúteos, dando un apretón y como consecuencia el roce de sus cuerpos-

New: ¡O-oye! —antes de refutar sus palabras, fuí callado con un beso—

Empezaba a sentirme deseoso por cada beso de Tay, siendo más adictivos. Hubiéramos empezado otra ronda de caricias fugitivas si no hubiera sido por el sonido de la puerta abrirse.

Lost In The NightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora