La historia de Conejitoblanco, la loba aventurera

Capítulo 7: Bombardeo en la Fortaleza

Narra A_Happy_Mangle

6 años más tarde, cuando Conejitoblanco ya tenía 17 años, ya era toda una loba ártica. Ahora disponía de un flequillo negro en su frente con una corona de flores de la libertad en su cabeza. Sus ojos se notaban más y eran de un color azul oscuro.

En su cuello llevaba un collar azul de picos, en su cintura llevaba una pollera arco iris. Luego en sus pies, en vez de los guanteletes fantasmas, llevaba los guanteletes de Greely, muy poderosos. En su cola tenía flores rosas, violetas y celestes.

Se entrenaba cada día en el campamento de Frentes de Batalla, y su maestro era Sir Gilbert que le enseñaba a hacer mejor las aventuras.

A diferencia de ella, su hermana Catuchi ya tenía 5 años y sin embargo ya también se parecía a una loba ártica, parecía tener crecimiento acelerado o salió un poco más parecida a su padre.

Un día su hermana se fue a la casa de su amiga a dormir, mientras que a Conejito iba al campamento.

Narra Conejitoblanco

De camino a el campamento Frentes de Batalla, que a veces me quedo a dormir con otros jammers y a menudo era invadido por fantasmas, vi que su bosque estaba muy contaminado por ellos.

Nos sentamos alrededor de Sir Gilbert.

Sir Gilbert: Esto ya no puede estar pasando, jammers. Toda esta contaminación y fantasmas vienen de la fortaleza fantasma. Hemos tratado de vencerlos, pero no fue suficiente. Así que debemos elegir a algún jammer para que vaya y destruya a la fortaleza lo antes posible, porque sino toda esta contaminación llegará a toda Jamaa y los fantasmas la dominarán como pasó hace años!

Narra A_Happy_Mangle

Todos, por el miedo, no levantaron su pata.

Solo una, entre los jammers, se levantó. 

Era Conejitoblanco, que, luego de tantas aventuras hechas, se animaría a ir a la fortaleza fantasma.

Todos se dieron vuelta a verla, horrorizados. 

Sir Gilbert: Vaya, tú! ¿Estás segura de que quieres ir?

"Si. Yo iré." respondió la valiente jammer.

Empezaron a susurrar. Ella se levantó y fue con Sir Gilbert.

Sir Gilbert: Ustedes vayan a defender el campamento, yo tengo que hablar con Conejito.

Fueron a la carpa del tigre.

Sir Gilbert: Oye. La fortaleza fantasma es muy peligrosa, y no se sabe que podría pasar allí adentro. ¿Estas segura, segura?

Conejitoblanco: Sip, estoy segura.

Sir Gilbert: Muy bien! Estoy seguro de que lo lograrás, como lo hiciste con las demás aventuras.

Ambos sonrieron.

Narra Conejitoblanco

Ahora si tendré que tomarme las cosas en serio.

Fui a contárselo a mis padres, pero se horrorizaron. Menos mi padre, que estaba seguro. Mi madre me dio un largo discurso de lo que podría pasar, yo le dije que estaría bien. Mi padre también le dio seguridad sobre mí, y accedieron a dejarme ir. ¡Estaba muy feliz!

Tomé el autobus y fui a uno de los bosques, donde llegué y estaba al frente de la fortaleza. Era enorme. Allí estaban Graham y Sir Gilbert.

Sir Gilbert: Por fin estamos aquí: el frente de la Fortaleza Fantasma. ¡Es el momento de poner fin a esta máquina infernal de una vez por todas! Desde que hace mucho tiempo la pluma de Mira restableció la tierra y los atrapó, los fantasmas aumentaron sus defensas y todos están en alerta.