CAPÍTULO 13: Valen y Alejandro

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Holaaa!!!
Aquí tenéis el capítulo 13, he tardado unos días más porque me puse mala con fiebre (gracias a la gente que me habló❤) pero ya estoy mejor y en los ratos que tenía lo escribí.

Gracias por seguir ahí, leyendo y comentando, los quiero, nos leemos pronto.

Me pueden dejar abajo lo que quieran

Disfrutad (~4.5k palabras)...












Al día siguiente, cuando Agoney se despertó, llevó a su hija al colegio y antes de irse a trabajar tuvo que volver a su casa a coger algo que se le había olvidado. Salió de trabajar con la hora buena para ir a recoger a su hija, así no le tenía que decir a Carlos que fuera a por ella, siempre que pudiera ir él, lo prefería y cree que su hija también.

Cuando llegaron a su casa, comieron sin conversación y Agoney se llevó a valentina con él a su cuarto para contarle la noticia

-Ven mi amor, siéntate aquí conmigo que te tengo que decir algo muy importante -le dijo con una gran sonrisa-

Valentina se sentó entre las piernas de su padre y puso cara de atención

-¿Te acuerdas que tú papa Raoul y yo íbamos a tener un hermanito para ti? -le dijo acariciándole el pelo-

-Sí, me acuerdo que me dijisteis que iba a tener un hermanito para que no estuviera sola y para que lo cuidara

-Pues ya lo tienes mi amor, está en casa de Raoul, es un niño, se llama Alejandro. Es muy chiquito pero es precioso como tú, ya verás cuando lo veas

-¿Sí? -abrazó fuerte a su padre- ¿de verdad? ¿Y cuando podemos ir a verlo?

-Si quieres le preguntó a Raoul si puede y vamos, ¿te parece?

-Si, si por favor, quiero ir a verlo -dijo dándole un beso a su padre en la mejilla- pero una cosa -dijo la niña con cara de estar pensando- ¿De dónde sacó a mi hermanito?

-Existen unas agencias que se encargan de encontrarle familias a bebés que están solos o que sus padres no pueden cuidarlos, nosotros nos apuntamos ahí y al cabo de un tiempo nos entregaron a Alejandro- le explicó su padre sonriendo-

Agoney cogió su móvil y le envió un mensaje a Raoul preguntándole que si podía ir con Valentina a ver al niño, que se lo había contado y se había puesto muy contenta y quería ir a verlo. Le contestó que sí, que por supuesto, que se pasaran cuando quisieran.

Y allí estaban, los dos tocando a la puerta de la casa de Raoul con una sonrisa adornando su cara.

Cuando Raoul abrió la puerta, Valentina fue rápido a abrazarlo

-Hola princesa -la rodeó con los brazos y le dejó un beso en su cabeza- ¿Estás feliz?

-Sí, papá ya me contó que tengo un hermanito chiquitito, ¿lo puedo ver? -le preguntó con un puchero en su cara que Raoul quiso comérselo a besos-

-Claro, ve al salón y siéntate que voy a buscarlo

Valentina le hizo caso y se fue al salón dejándolos solos

-Gracias -dijo mordiéndose la sonrisa-

-No tienes que agradecerme nada, es su hermano, tiene todo el derecho a conocerlo, pasa -le hizo una señal para que entrara- ve con Valentina que voy a por el niño al cuarto

Agoney cuando cerró la puerta, pasó por delante de Raoul y no pudo evitar dejarle una caricia en la mejilla, era superior a él tenerlo cerca y no poder tocarlo.

Al final, El amor siempre gana (Ragoney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora