❝ Eres mía. Sólo y exclusivamente mía. Sigue las reglas y los dos estaremos contentos ❞
➳ Lenguaje vulgar.
➳ Se sexualiza a Jeon JungKook.
➳ Heterosexual.
➳ Relación tóxica.
➳ Lenguaje ofensivo.
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Lisa me había avisado sobre las 7 de la mañana que se iría a la cafetería, yo decidí quedarme en el hotel porque sinceramente no me apetecía levantarme y mucho menos vestirme.
Me encontraba en la cama jugando con el móvil, no había mucho que hacer en la habitación y aunque Lisa se acabara de ir ya me aburría.
Sin embargo segundos después escuché la puerta de la habitación abrirse, ignoré aquello y no me molesté ni en mirar hacia allí, seguramente fuera Lisa ya que se acababa de ir y probablemente se habría olvidado algo.
— ¿Qué se te ha olvidado? —cuestioné debajo de la manta.
— Follarte muy duro —contestó cerrando la puerta a su paso.
Pero qué cojones.
— Me has encontrado —murmuré a la vez que dejaba mi móvil en la pequeña mesilla que había y me tapaba aún más con el edredón.
— Te dije que lo haría —dijo apoyándose en la puerta—. ¿Sabes qué va a pasar ahora? —preguntó con diversión mientras me miraba.
Por lo que negué con la cabeza para contestarle.
— Te voy a follar duro —se pausó por unos segundos—. Muy duro.
Me quedé estática en la cama, quería salir corriendo pero por alguna razón mi cuerpo no se movía, no reaccionaba. No tenía escapatoria.
JungKook se acercó hasta mi posición, iba vestido todo de negro, una camiseta holgada y unos pantalones como de deporte. La verdad es que se le veía bastante bien, pero cuándo no.
Tiró de la sábana y me la quitó, haciendo así que quedara en ropa interior delante suya.
— Espero que estés preparada porque fuiste muy mala ¿sabes? Debiste haber contestado mis mensajes —dijo en un tono bajo.
— ¿Cómo me has encontrado? —fue lo único que pudo salir de mi boca.
— Magia —contestó con diversión.
Tenía pánico, por ello salí de la cama por el lado opuesto en el que se encontraba él y corrí hacia el pequeño baño.
JungKook al ver que estaba escapando corrió detrás de mi y antes de que pudiera cerrar la puerta él ya había entrado. Colocó sus manos en mi cintura y me elevó para sentarme en el pequeño lavamanos.
Se le veía muy decidido en lo que iba a hacer, sin embargo yo no tanto. .
— Al menos ¿podemos hacerlo en la cama? —cuestioné.
JungKook alzó una de sus cejas.
— No seas caprichosa —contestó.
Entumí mi cuerpo dándole a entender que no lo quería hacer en el baño, no planeaba dejar que hiciera esto a su modo.
