I.W.K.S | seongjoong

Capítulo N.1

Hongjoong se sentó a la orilla de la cama. Donde en su mesita de noche tenía su caja de cigarrillos, tomando uno y llevándolo a su boca para encenderlo y dar la primera calada, mientras veía al hombre con el pecho desnudo a su lado quien llevaba observando sus acciones.

—¿Qué estás esperando?, ¿Quieres quedarte hasta navidad?—dijo con el cigarrillo en sus labios de la manera más cortante.

—Eres perfecto, Kim.

—Por supuesto... soy el puto amo, literal y figurativamente.—bufó con sorna.

—Quiero besarte, pero no me agrada el sabor a ceniza.

La ceja de Kim se alza en claro disgusto del sarcasmo ajeno y fuera de lugar, aprieta sus labios alrededor de ese cigarrillo, da una calada y con evidente molestia lanza el humo en el rostro de su acompañante.

—Oye, bájale a tu tonito. Mi departamento, mis reglas, mis ganas de fumarme un maldito cigarrillo. ¿Qué edad tienes para pedir un beso?, es hora de crecer, idiota—aparta el cigarro de sus labios sonriendo.

—Oh, vamos Kim...luego de lo que ha pasado, un beso estaría muy bien recompensado.

—Tú única recompensa por mi parte es... que te mande a la mierda. ¡Largo! se terminó tu tiempo, no esperes regalías.—dice señalando con su pulgar tras suyo.

El tipo se levanta y se viste de mal humor. Pero ¿qué podía esperar?, no era su primera vez con Kim Hongjoong, se supone que ya sabe cómo funcionaban los intercambios.

—¿Podemos quedar para tomar algo esta vez?

Hongjoong quitó el cigarrillo de sus labios nuevamente para sacudir la ceniza de este, ignorando la mirada del tipo, no se inmutaba, en realidad catalogaba a este tipo como una molestia. Heechul era lo más lejos que mínimo gustaba de un hombre.

—Sí quieres compañía y sentimentalismo para sentir que alguien te quiere. Ya sabes quienes se dedican al servicio y no me busques a mi. Escuché que mientras más pagues la cita incluye besos, y tú que necesitas atención como un niño la exige con su madre, deberías aprovechar, a lo mejor eso resuelva tus issues—dijo con una risa emergiendo de sus labios.

Siwon solo sonrió. Su sonrisa era más con incomodidad por escuchar la crueldad de las palabras del pelirrojo. Los rumores de que era alguien difícil eran ciertos.

—Hey, vete—sus dedos se mueven en un ademan—que la fila es larga y me estás estorbando. —le recrimina Joong.

Entonces Siwon sin más que decir sale del piso. Hongjoong lo ve desaparecer, deja el cigarrillo en el cenicero y se lanza en la cama, estirando su cuerpo que pedia una ducha, ya que odiaba que los perfumes ajenos se quedaran en él. Habían clientes que querían poner "sentimentalismo" a su intercambio, e incluso varios de aquellos le invitaban a salir, pero él no estaba agarrado de la mano con esos asuntos.

Miró al lado de la cama y vio los billetes que Siwon había dejado: su paga. No se quejaba el podía conseguir dinero en todo el día, todos los días, con quién y cada vez que quería.

¿En verdad valía la pena estar arraigado a una creencia como lo es el romance?, pues no, al menos para Hongjoong no, ya que para él poseer el dinero de sus clientes era su motivo de felicidad.

Sonrió ante el dinero. Era excelente, él era el maldito amo cuando de trabajar se trataba, y muchas veces no trataba para nada bien a sus clientes, y no era cuento nuevo, todos eran estúpidos y no ponen resistencia a sus malos tratos; es como si les encantara el desafío que era Kim Hongjoong, por eso volvían, siempre vuelven, y a veces algunos hablaban de sus servicios a sus amigos, lo cual era mucho mejor.