I.W.K.S | seongjoong

Capítulo N.12

No sabe cuánto tiempo lleva abrazándole, solo sabe que no ha parado de llorar en sus brazos. El clima estaba frío y podía sentir como aquel rubio temblaba de vez en cuando, él mismo incluso estaba sintiendo como su cuerpo perdió el aclimatado de la habitación suya, sus dedos también están fríos, pero sobre todo le preocupaba su mal estado.

Y siendo realistas, eran los únicos idiotas no resguardados del frío y de las gotas pesadas de lluvia, quedarse afuera a esas altas de la noche con la baja temperatura ambos podrían resfriarse y empeorar el estado anímico inclusive.

Decidido quiere tratar de despegar a Seonghwa de su pecho, quien se niega en un inicio abrazándole más y llorando como si no fuese a acabar.

—Dulzura, está bien, debemos irnos... el clima se está poniendo difícil—susurró con su voz temblando, realmente no creía como es que aquel lleva tanto tiempo fuera.

—Yo... no... quiero volver. Estoy realmente perdido—volvió a quebrar en llanto y se aferra más al abrazo, buscando con desesperación un consuelo.

Hongjoong le mira con tristeza, no tenía idea de que una persona podría llorar con tanto dolor acumulado. Bueno, está familiarizado, pero esta vez no se trata de él, sino de otra persona con el destino burdo. Pareciera que estar hechos para recibir un desequilibrio emocional es lo único que tendrían en común.

Despega sus manos de sus hombros donde lo abrazaba y busca el rostro del rubio. Siente sus mojadas mejillas, heladas por el frío e ignorando el leve calambre de sus dedos gélidos, le levanta el rostro y ve como cierra sus ojos con fuerza en un intento vano de parar de llorar.
Con sus pulgares trata de limpiar su rostro y tratando que el significado de la empatía se muestre tras ese contacto, dice.

—Escúchame... vámonos. Aún tienes mucho que pensar, los pedazos rotos que sientas siempre deben recogerse o lastimarán en un descuido. Seguir con tu vida es lo que debes hacer...

—Mi vida estaba junto a ella.

Una punzada de ¿envidia?, sobre la aclaración, no, era codicia, envidia no puede ser porque cree haber estado en esa situación, dando lo que tiene... es codicia porque en cambio nadie se refirió a él como un deseo de quererlo para siempre; suspira y le mira a los ojos llorosos e inflamados. Aún sus pulgares buscaban borrar las lágrimas que parecían interminables nacimientos.

—Lo sé, Dulzura. Sé lo mucho que la amas, pero ahora no seas injusto contigo...

—¿Qué hice mal?

—Pensar que ella te amaba de la misma manera. Y lo siento que te lo diga justo ahora, sé que no es el momento... pero dijiste que te gustaba que fuera sincero.

Por primera vez Hongjoong quería ser cuidadoso con sus palabras. Y realmente sí quería decirle esa respuesta y por eso lo dijo sin mucho pensarlo.

—¿Qué haré sin ella? ¿Cómo debo acostumbrarme sin ella? ¿Cómo voy a dejar de amarla? ¿Qué...?

—Cuando pienses en ti como "Park Seonghwa", no como "el esposo de", ¿entiendes?.

Seonghwa mantiene sus ojos en él y quiere llorar cuando es Hongjoong quien le dirige una pequeña sonrisa, pensó que lo odiaba, creyó que era insoportable y miserable para llamarle, pero si Hongjoong pensara lo mismo... no estaría ahí.

—Lo lamento por llamarte...—comentó el rubio en un susurró que pareció ser desvanecido por o falta de fuerza— de verdad...

—Seonghwa...

Hongjoong le pide que deje de hablar, para luego ir inclinándose lentamente hasta el rostro ajeno. Seonghwa deja salir unas lágrimas silenciosas mientras lleva sus manos hacia las de Hongjoong, haciendo que este detenga la acción, mientras su narices estaban rosándose.