Detención 4

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-Namjoon, necesitamos limpiar...

-De verdad me gustas, Jin -Lo interrumpió, tomando sus manos.

Y Seokjin temió por lo que sintió dentro de su corazón, porque sus palabras lo habían hecho sudar de las manos y su ritmo cardíaco dio un aumento abrumador. No podía ser posible, Namjoon no debía sentir eso por él, ellos nunca funcionarian juntos.

Quedándose pasmado en su lugar y sin poder parpadear, Seokjin tragó disimuladamente el nudo que depronto sintió en su garganta y se apartó las manos de Namjoon que aún las mantenía unidas.

-Muévete

-¿Qué? -Preguntó, confundido. La pequeña sonrisa que había aparecido en sus labios fue borrada.

-¡Que te muevas! -Seokjin lo empujó al punto de gemir un poco por el brusco movimiento del miembro de Namjoon siendo sacado dentro de él. Sus piernas temblaron al momento de poner sus pies sobre el suelo y chistó cuando el líquido empezó a escurrir de sus piernas de forma lenta-. Mierda...

-Déjame ayudar a limpiarte... -Con su bóxer y pantalón subidos, Namjoon comenzó a caminar devuelta a él, pero se detuvo al instante de escucharlo hablar.

-¡No te acerques! No importa, me iré de una vez.

Seokjin subió su bóxer y pantalón sin importarle mojarlos, afortunadamente estos eran negros que podría camuflar un poco la húmedad. Los abrochó y caminó hasta su mochila la cuál estaba sobre el asiento del pupitre. Al abrirla, maldijo al no encontrar papel higiénico. La mirada de Namjoon seguía puesta sobre él.

-¿No tienes papel higiénico para poder limpiar eso? -Preguntó sin observarlo.

-No...

-Genial -Se quejó y sacó una libreta, arrancando dos hojas, devolviendo la libreta dentro de su mochila cuando lo hizo. Caminó nuevamente al escritorio y extendió su brazo hacia Namjoon rehusandose a mantener contacto visual- Ayúdame para poder largarme de aquí -Murmuró con brusquedad.

Namjoon se acercó, sin poder comprender su actitud. Su corazón se estaba estrujando cada vez más. Cuando la tomó, ambos comenzaron a limpiar, teniendo un ambiente tenso a su alrededor. Namjoon sabía que la había cagado, era un completo imbécil. Sentía que debía decir algo o más bien, que Seokjin debía decirle algo, que almenos lo mirará, quería sentir nuevamente esa conexión que sintió en su mirada cuando le había acariciado el rostro antes de tener su orgasmo.

-J-Jin... -Decidido, lo llamó primero. No aguantaba más ese silencio sofocador.

-No te atrevas.

Namjoon frunció el ceño y su garganta se secó.

-¿Qué no me atreva?

-A repetirlo -Incorporándose, fue al bote de basura a tirar la hoja que sostenía en su mano. Al girarse, se encontró con los ojos angustiados de Namjoon, mirándolo expectante-. No vuelvas a repetir que te gusto. Yo no te gusto, lo que te gustó fue el sexo que tuvimos y nada más, así que no vuelvas a buscarme.

Rápidamente caminó a su pupitre para tomar su mochila, pero sintió un agarre fuerte en su muñeca que lo hizo detenerse. Su mirada se posó en el agarre y trató de zafarse, pero Namjoon ejercía mucha fuerza que incluso su muñeca dolió.

-Suéltame, me lastimas -Dijo en un tono duro y nuevamente forzó para que lo soltara, pero no lo hizo.

-¿De verdad crees eso? -Pronunció aquella pregunta en un susurro que provocó un escalofrío en la piel de Seokjin.

-Sí.

-Responde ese "sí" mirándome a los ojos -Lo jalo hacia su cuerpo. Seokjin jadeo en sorpresa pero no levantó su mirada-. Levanta la jodida cabeza, Seokjin y responde.

Detención; NamJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora