Detención; NamJin

Detención 9

Con los labios apretados para no emitir ningún sonido, Seokjin se giró bruscamente y caminó por todo el pasillo con las manos temblando y la vista siendo nublada a causa de las lágrimas que comenzaban a aparecer. Al salir, un pequeño sollozo se hizo escuchar y sin darse permiso, las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos.

En ningún momento dejó de caminar rápidamente. Nada le impediria llegar a su cama y hundirse en ella hasta que dejara de sentir ese fuerte dolor en su corazón. Sabía que esto ocurriría, claro ¿quién podría enamorarse de alguien cómo él? Alguien que ni siquiera es seguro consigo mismo, alguien egoísta, alguien que le encanta lastimar a los demás y dejarlos hasta que ya no les servía. Se merecía todo ese dolor que lo estaba desgarrando por dentro pero aún así no podía evitar odiar a Namjoon por haberlo ilusionado. Seguro en ese momento ambos se estaban riendo de él por lo idiota que fue al caer.

Cuando sintió esa ira al imaginarselos riendo a sus espaldas combinada con la tristeza, corrió, aún si las lágrimas le impedían ver. Quería abrazar a su madre, que lo consolora y le dijera que todo iba a estar bien aún si no fuera así.

Su mano temblorosa giro el picaporte al llegar y se adentró, dejando que sus sollozos y su respiración agitada se escucharan por toda la casa. Su madre totalmente alarmada al escucharlo, bajó casi corriendo las escaleras y al verlo, inmediatamente lo abrazó.

—Dios mio, Seokjin —Lo apegó todo lo posible a su cuerpo y acarició su espalda mientras con la otra mano acariciaba su nuca. Seokjin tuvo que inclinarse hacia delante para poder acurrucarse ya que ella era mucho más pequeña— ¿Que te pasó? No me asustes así y dímelo, bebé.

Seokjin la abrazó con fuerza y siguió desmoronandose.

—To-Todo fue u-un juego, mamá. É-El me e-engaño... —sus hombros se sacudieron y pronto sintió como su madre caminaba para dirigirlos al sillón y poder tomar asiento. Ella lo siguió abrazando mientras él se acurrucaba en su pecho—. Te di-dije que no debía e-enamorarme. Hi-Hice mal, te lo dije...

—No, mi amor, claro que no hiciste mal.... —Sus dedos acariciaron su mejilla mientras la limpiaba. Ya se había creado una idea de quién estaba hablando— Es normal que en el amor ocurran estas cosas. Este sentimiento no te promete felicidad muchas veces pero aún así se puede sobrellevar si es que tiene solución.

—Pe-Pero él se burló de mi y no lo culpo... Después de todo yo tuve la culpa de que jugara conmigo. En este caso nada tiene solución.

Su madre frunció el ceño totalmente confundida.

—¿Cómo que tú tuviste la culpa? ¿Qué quieres decir?

Su tembloso cuerpo se había calmado un poco así como sus sollozos gracias a las caricias de su madre, sólo lágrimas silenciosas seguían mojando sus mejillas. Jugó con el borde de la blusa de ella entre sus dedos y un sonoro suspiro tembloroso brotó de sus labios. Ella lo observaba con atención a pesar de no verle los ojos.

—Yo... tuve algo que ver con Namjoon hace como un mes... —Murmuró. El sentimiento de asco a si mismo volvió como esa vez ante sus acciones— é-él me confesó que yo le gustaba y le rechacé de la peor manera porque tenía miedo de enamorarme ya que para ese entonces a mi también me gustaba. Por eso después comencé a tener algo con Kyung, para intentar olvidarlo pero fue imposible, seguía pensando en él. Reconocí que me gustaba demasido tarde y él sólo volvió a mi para vengarse y me lo merezco por ser un asco de persona —Su voz se quebró en la última palabra y sus hombros se sacudieron anunciando que estaba llorando con fuerza nuevamente.

—No eres un asco, no lo eres... —Besó su cabeza y ahí se quedó, sintiendo un nudo formarse en su garganta al ver a su hijo sufrir así— mi amor, no justifico tus acciones porque no fue la manera correcta de haberlo rechazado pero aún así entiendo tu miedo, bebé. Tal vez debiste haber dicho la verdad desde un principio. Además ¿que fue lo que te hizo para decir que se vengó de ti? ¿Te lastimó?