Blair.
-Una canasta llegó en lugar de una carta.-Me dijo la chica de recepción y al entregármela le di las gracias.
Sara no estaba en la habitación, tenía un mensaje de mi madre y uno de Jordan por el momento decidí ignorar ambos.
De la canasta colgaban unas cuantas flores sintéticas, había varias cosas adentro, lo primero que me encontré fue un kit para bordar, era muy lindo, tenía hilos de colores, agujas y dedales, también había un suéter de la universidad de mi color favorito: azul, también había algunos dulces y plumas negras de tinta gel, cuando llegue a las cosas de papelería de la canasta me emocioné aún más, evoce una sonrisa y seguí adentrándome en los objetos de la canasta, hasta que encontré una nota.
Querida B, creo que hemos llegado a conocernos mucho más de lo que esperábamos durante este tiempo, propongo rompamos las reglas y nos veamos el fin de semana.
- D.
Eso era justo lo que necesitaba, romper las reglas para librarme del mal rato que me había hecho pasar mi madre unos días antes, y aunque seria más seguro reunirme con alguien que no conozco el día destinado a conocerlo, bajo supervisión de la universidad, me agradaba mucho más la idea de no hacerlo de esa manera.
Guardé todo en la canasta de nuevo y abrí los mensajes de Jordan de mi celular, pues estaba decidida a no responderle a mi madre los mensajes.
•Que harás hoy? :)
•Necesito comprar unas cosas ¿ Vienes conmigo?.- Envié, me sentía mucho más cómoda saliendo con Jordan de lo que jamás hubiera imaginado desde que fuimos a jugar bolos, supongo que a Sara no le agradaría nuestra amistad, pero ambos habíamos acordado no decirle nada, hasta ahora me sentía más cómoda con el que con mi propia compañera de habitación.
•Estoy en camino.
Jordan llegó unos cuántos minutos después, subió hasta mi dormitorio luego de que me hiciera jugarle que Sara no estaba allí, se sentó en la silla de mi escritorio a esperar mientras tomaba mis cosas.
¿Que necesitas de la tienda?.-Curioseo mientras tamborileaba la madera con sus dedos.
-Necesito comprar los toques finales para mi canasta, esperaba poder enviarla antes de las 9:00 pm .- Jordan abrió los ojos como platos, y casi estaba segura de que era porque no recordaba que debía hacer una canasta.
-Mierda.- Murmuró y me reí por lo bajo ante su expresión.- Supongo que ahora también tendré que comprar algo.- Le indiqué que estaba lista para irnos y Jordan se levantó de su asiento, al llegar al estacionamiento, Jordan me indicó donde estaba su auto.
-De hecho.- Le dije.- Estaba pensando que talvez podríamos ir en el mío, necesito practicar cuanto pueda, no soy la mejor conductora.
Jordan me miró juguetón y comenzó a retarme.- Creí que habías dicho que eras buena en todo.- Comentó mirándome de reojo.
-En todo menos en conducir.- Admití rodando los ojos hacia el.
-Ni tampoco jugando bolos.- Dijo sonriendo con superioridad.
-Ya lo sé.
- Ni en ningún otro juego.
-Jordan!.- Murmure en forma de advertencia.
- ¿Ya mencioné cálculo?.
-Basta!.- Le dije y el río a carcajadas en el estacionamiento.
-Vale, tu conduce.- Aceptó y fuimos hasta mi auto, subimos a el y Jordan se abrocho el cinturón del asiento del copiloto con un dramatismo horrible.
- Si se conducir, solo que me pongo muy tensa al hacerlo, no es como que vaya a volcar el auto.
-La seguridad es primero. -Respondió, encendí mi auto y comencé a avanzar en reversa para poder salir de donde me había estacionado, miraba cuidadosamente por los espejos.
-Cuidado Blair!.- Gritó Jordan y yo frené en seco, asiendo que el auto se sacudiera hacia adelante, Jordan comenzó a reír y yo no encontraba lo gracioso.
-Aggh.- Gruñí.- Eres un...- Me detuve antes de decirlo y respire hondo.
-¿Un que ?.- Preguntó mientras pasaba su brazo por mi asiento, comenzó a acercarse hasta que pude sentir su calidad respiración, se me enchino la piel, y acercándose aún más me llamo por mi nombre. -¿ Blair?
-Nada.- Encendí el carro una vez más y cuando logré salir de dónde estaba estacionada todo fluyó un poco más rápido, pues ya había ido a Target una vez y no me sentía tan desconfiada.
-Destesto que hagas eso.- Me dijo.
Luego de mirarlo con incredulidad unos segundos lo cuestione. - ¿ El que ?.
-Te conozco por menos de una semana y ya he notado al menos cien veces que te reprimes de hacer o decir lo que quieres.
- No es verdad.- Intente defenderme pero el no quedo conforme con mi respuesta.
-Claro que sí. -Me acusó.- Lo haces siempre, como hace un rato, te aseguro que ibas a decir una mala palabra y por eso te detuviste.
-No tiene nada que ver con que este reprimida, decir malas palabras es de mal gusto, es todo, además si reprimiera mis deseos no habría quedado con alguien para ir a una fiesta.- Dije orgullosa, Jordan me miró sorprendido, justo la reacción que esperaba.
- ¿ Que fiesta?.- Preguntó esperando que no supiera que decir, pero había escuchado a algunos chicos de mi clase hablar sobre una fiesta en la fraternidad CAO, así que era la cuartada perfecta.
- La de CAO, en la fraternidad.- Supongo que ahora que lo pienso, era la oportunidad perfecta para conocer a D, odiaba que me juzgaran y el día de hoy me sentía más valiente que nunca.
-Vale, ¿Con quién irás?.
-Con D. - Respondí.
-¿D?.
-Si, es el chico que me ha tocado en la actividad de las cartas, es de Rusia, me ha enviado mi canasta hoy y me invitó.- No era una mentira tan grande, si me había invitado a salir, no a la fiesta, pero yo pensaba decirle que nos viéramos allí.
-¿Te vas a ver en una fiesta, cosa que es nueva para ti, con un chico mayor que no conoces donde por cierto habrá bebidas y sustancias que tampoco conoces ?.- Preguntó alzando una ceja hacia mi.
Ya habíamos llegado a Target, y había encontrado un buen lugar para estacionarme.
-¿ Hay algún problema ?.- Inqueri con sarcasmo, sus mandíbula casi cae al piso.
-Hay como ochenta, voy contigo. -Me informó.
-¿Qué? ¿Que pasó con lo de no reprimirse? ahora tú lo haces, de ninguna manera, no vas a ser mi niñero.- Exclame bajando del auto.
-No como niñero.-Dijo haciendo una mueca.- Más bien como tu chaperon, no conoces a ese tipo, y me sentiría más cómodo si estoy allí, solo para que puedas llamarme en caso de que te sientas incomoda.- Pensándolo bien, yo también me sentiría mucho más cómoda si iba acompañada, Jordan tenía razón, verme con alguien desconocido en un ambiente fuera de mi zona de confort no era la mejor idea, además podía perderme en la fiesta o de camino a ella.
-Esta bien.- Accedí.
Sara.
Me había encontrado con el chico más guapo de la vida hace unos días, quería contarle a Blair, pero ella casi nunca estaba en el dormitorio, al menos no cuando yo si lo estaba, había visto sus horarios y estaba llenos de clases así que no había tenido oportunidad de contarle.
Aunque no me gustaba salir sola, al rededor de las 5:00pm decidí bajar a comer algo al comedor de la universidad, elegí un guisado que olía bien y spaghetti.
- ¿Chocamos de nuevo?.- me preguntó alguien desde atrás y de inmediato supe quien era, una sola de nervios invadió mi cuerpo, me coloqué un mechón de cabello detrás de la oreja y giré con cuidado.
-Hola.- Le dije sonriendo sutilmente.
-No pude aguantas las ganas de preguntar.- Respondió y yo me mordió la lengua para no gritar.- ¿Quieres salir conmigo ?, el sábado.
- Si!.- Contesté de inmediato,salir con chicos que no conocía no eran lo mío, pero hubiera aceptado la invitación a donde fuese.
-Vale, aquí esta mi número.- Indicó entregándome una nota adhesiva color verde.- Envíame un mensaje y nos ponemos al tanto de detalles.- Sonriendo y tras un saludo de despedida se fue de la cafetería, no podía estar más feliz.
Ojala Blair hubiera estado en el dormitorio cuando llegue, tenia que contarle a alguien, Jordan seguía enojado conmigo y en realidad no conocia a nadie mas, quiero decir, si conocia a mas personas pero no era cercana con ninguna de ellos, todo había sucedido muy rápido, mi cabeza aún no procesaba lo increíble de la situación, le pediría a Blair que me acompañara de compras para buscar algo bonito que usar en la fiesta, no podía esperar.
Blair.
Llegué un poco más tarde de lo planeado, Jordan se pasó horas viendo lo que pondría en su canasta, y le puso mucho empeño para ser algo que según el "No le importaba una mierda", en el dormitorio, Sara se encontraba tomando una siesta, y yo coloque todo en la cama de prisa, D me había dicho que le gustaba la geografía, así que le compré 2 de mis libros favoritos de Jules Verne, que de seguro le gustarían, entre otro montón de cosas y una gorra de su equipo favorito de Baseball, al terminar de acomodar todo tome un post-it y escribir una nota.
Me siento valiente el día de hoy ¿Fiesta de CAO el sábado?
-B
La pegué sobre la portada de uno de los libros y luego bajé al estacionamiento, Jordan se había adelantado a entregar la suya, encendí mi auto y conduje hasta el edificio de D, acción que literalmente me tomó dos minutos, pude haber caminado hasta aquí, pero ya estaba muy oscuro como para caminar yo sola por el campus, dejé la canasta en recepción justo antes de que la chica se fuese, me sonrió y recibió la canasta, y se fue junto conmigo del edificio.
Volví a mi dormitorio, y la emoción corría por mis venas, estaba segura de que diría que sí, ni siquiera me imaginaba como se vería y llegó una incógnita llegó a mí ¿Cómo iba a reconocerlo entre tanta gente ?, arrepentida por no haber puesto información un poco más específica, entre en el baño para tomar una ducha, una vez que había terminado me quedé bajo la regadera, pasaron 20 minutos ó unas 5 canciones de mi playlist y yo estaba empezando a sentirme mal por desperdiciar el agua, mi teléfono vibraba una y otra y otra vez, salí de la regadera y me abroche la bata de baño por la cintura antes de tomar mi celular.
-¿Por qué ignoras a mamá? Esta molesta.- Me envió Liam, no estaba en lo absoluto de humos para los dramas de mi madre, pero ya la había ignorado casi dos días y de seguro estaba perdiendo la cabeza, decidí llamarle, así no empezaría mal el día mañana, el teléfono timbró solo dos veces antes de que ella contestara.
-¿Por qué no contestas el teléfono?.- Me espetó justo como esperaba.
-Madre, ya sabes que no estoy en mi teléfono todo el día.- Respondí casi por rutina.
- Dos días Blair ¿me dirás que no tocaste tu celular en 2 días?
-No para responder mensajes, tengo muchas clases y muchas cosas que hacer, ¿que necesitabas?.
-Nada, solo estaba preocupada, quería saber si no estabas en una zanja.- Detestaba que mi madre fuese a los extremos tan rápido, y odiaba cada vez que decía cosas como esa ¿cómo se atrevía?, no estaba de humor para hablar con ella.
-Pues no, estoy muy cansada, ya tengo que irme a dormir.-Le dije y sin esperar a que respondiera colgué en teléfono, de verdad no quería tener una mala relación con mi madre, pero ella no ponía nada de su parte.
