DEMON OR ÁNGEL? (zodiaco)

Capítulo 11

Confusión en grupo.

Todos acudieron corriendo al lugar de donde provino el disparo.

El bosque.

Los primeros en llegar fueron Escorpio y Aries. Eran los que estaban más cerca de allí.

-¿¡Qué fue eso?!- gritó Aries. La Escorpiana solo se encogió de hombros.

Los dos se dedicaron a observar por todos lados. Sin encontrar nada.

-¿Qué es eso?- susurró Escorpio.
Una pequeña llama azul apareció ante sus ojos. Escorpio hipnotizada por su resplandor, no pudo evitar seguirla.

-¿¡Escorpio?!- gritó Aries al ver que la chica se perdía entre los árboles.

La chica seguía en ese estado de tranze e hizo caso omiso a los llamamientos del Ariano. Él, en cambio, sabía que podía perderse en aquel bosque tan grande, así que optó por seguirla. Corrió hacía los árboles, los atravesó mientras veía como la luz que desprendía aquella pequeña llama, poco a poco iba desapareciendo y con ella, Escorpio. Empezó a preocuparse de verdad, así que aceleró aún más, las ramas de los árboles le rozaban los brazos, las piernas e incluso la espalda, haciéndole pequeñas heridas. Pero le daba igual en ese momento. Siguió corriendo hasta llegar a un claro. Que estaba vacío. Escorpio no estaba y él, se había perdido también.

Los segundos en llegar fueron Sagitario, Libra y Leo.

Los tres se dieron una mirada tensa y cargada de resentimiento.
Ninguno se atrevía a hablar, puesto que sabían que si lo hacían iban a acabar aún peor.
Como antes, solo se dedicaron a mirar a su alrededor.

-¡Eh!- gritó Leo -¿¡Quién eres?!-

Sagitario y Libra se pusieron a su lado, observando en la dirección en la que Leo miraba.

Una figura negra, de aspecto escalofriante, les miraba a través de unos árboles. Era como una especie de sombra, como la sombra de un espantapájaros. Sus ojos eran completamente negros y estaban vacíos.

Pasaron un par de minutos en los que nadie hacía nada. Ellos no se atrevían a acercarse y aquel bicho solo los observaba.

El espantapájaros sonrió, su boca torcida y surrealista, se amplió hasta rozar sus ojos, sus dientes blancos estaban completamente afiados y restos de sangre seca adornaban la comisura de sus labios.

-Ay. Dio. Si. To. Como dijo Piscis- susurró Sagitario.

De un momento a otro, el espantapájaros se acercó rápidamente y en una milésima de segundo, agarró a Libra y se la llevó a la fuerza, desapareciendo entre la oscuridad de los árboles.

-¡Libra!- gritaron al mismo tiempo Leo y Sagitario.

-¡Sagitario! ¡No!-

-¡¿Qué?! ¡¿Piensas dejarla sola, Leo?!-

Leo se quedó en silencio mientras bajaba la mirada.

-¡Es tu amiga!-

-¡Mi amiga mató a Acuario!-

-¡Sabes que no fue su intención!- el silencio reinó en ese lugar. -Bien, si quieres abandonarla es tu decisión, pero yo no pienso hacerlo. Es mi amiga y la tuya también, deja tu resentimiento a un lado...¿O es que también quieres perderla a ella?- dijo con los ojos llorosos. Leo levantó la vista y asintió.

-Bien, vamos, pero toma esto- dijo ofreciéndole un cuchillo. Sagitario lo tomó y ambos fueron en busca de su compañera.

Un rato después, aparecieron Virgo, Cáncer, Géminis y Piscis.