DEMON OR ÁNGEL? (zodiaco)

Capítulo 16.

El amor o desamor...

Piscis se acercó a mi lado. Tenía una sonrisa estúpida en el rostro y no me extraña nada después de lo que ví.

-¿Y?- pregunté dejando la "y" en el aire.

Él suspiro y su sonrisa se ensanchó aún más.

-Fue perfecto- dijo mirando a Libra. Reí sutilmente pero después una sensación de impotencia llegó a mi.

-¿Qué ocurre? Te noto rara...-

-No lo sé, creo que algo no va bien- dije apenada.

-¿Con Leo, te refieres?- preguntó él atento a mi respuesta.

-No, bueno sí, tal vez... Es que creo que hay algo entre ellos dos que no anda bien- respondí mirando a Acuario y Leo.

-¿Por qué piensas eso?- me miró con el ceño fruncido. Me encogí de hombros y a la misma vez solté un suspiro pesado.

-Se han estado comportando raro desde que- en ese punto, todo en mi cabeza conectó.

-¿Desde que...?- preguntó dejando las palabras en el aire.

-¡No puede ser!- grité, Piscis me miró confundido y con los ojos abiertos de par en par.

-¿¡Qué?!-

-Se han estado comportando raro desde que le explicamos a Acuario que la única manera de que él salga de aquí es matando a Cáncer- él me miro más confuso todavía. Tratando de entender lo que por mi mente pasaba en esos mismos instantes, después me miró con terror en los ojos y paso seguido miró a Cáncer.

Sí, sabíamos lo que eso significaba y no era nada bueno. Peor aún si Leo tiene algo que ver con todo esto...

Cáncer.

-¡Cáncer, para!- me gritó Aries mientras yo le daba un vuelta.

-¡No, nos estamos divirtiendo!- respondí dándole otra vuelta. Aries reía como si estuviese poseído.

-¿Pero qué estamos haciendo exactamente?- preguntó él gritando como loco.

-Bailar- respondí obvia. Aries soltó una sonora carcajada y le dí otra vuelta.

-Me estás mareando con tanta vuelta, Cans- la canción paró y ambos nos dejamos caer al suelo, exhaustos de tanto bailar. De vez en cuando nos salía una risita tonta.

-Gracias- rompió el silencio. Le sonreí mientras despeinaba su cabello con mis manos.

-De nada. Sabes que siempre estaré aquí para ti- dije apoyando mi cabeza en su hombro.

-Sí, siempre- afirmó él mientras sonreía. -¿Cans?- me llamó después de un par de minutos.

-¿Si?-

-Te quiero, como a una hermana. ¿Lo sabes no?- sonreí como una tonta ante su muestra de afecto. Aries no suele ser tan cariñoso y cuando lo es, es por que le sale de corazón.

-Lo sé, y yo también. Eres mi hermanito, mi hermanito mayor- dije apretándole las mejillas. Él rió y me bajó las manos para después darme un abrazo de oso.

Capricornio.

-Hola- dije sentándome a un lado de ella.

-¿Qué quieres?- me respondió cortante.