Haciendo las pases después de una pelea.
Kiki, fue tras Shaka y este le miro atónito, no podía creer todo lo que había pasado en menos de un segundo y Mu fue quien le hizo sentirse lo más horrible de este mundo.
—Shaka, gracias a Athena estas bien, perdona a mi maestro no tolera las injusticias o deslealtad, es muy temperamental
—Porque estas conmigo y no con el; pequeño
—No te tengo rencor o odio, ahora te conozco de verdad y se que cometiste un error gravísimo que fue por mi culpa
—Porque tu culpa, yo fui el que enfado a Mu y se dejo llevar pos sus emociones.
—Yo estaba enfermo, mi maestro me enseño la telepatía y telequinesis y por alguna razón mis oídos comenzaron a sangrar y mi cabeza dolía muchísimo, Mu se preocupo mucho por mi y se sentía tan culpable, que empezó a dejarse llevar por su temperamento y pasiones, dejo de lado todo lo que era porque no quería que nadie viera lo que me hizo a mi y creo que acabo de empeorar las cosas, lo deje solo en ese estado.
—Kiki, debiste decírmelo en vez de atravesarte en mi camino, no te lastime...
—Mi maestro me curo, mientras me abrazaba, si lo hubiera hecho desde el principio no hubiera sucedido todo esto, debemos arreglar este error.
—Me encantaría ayudarte, pero mi armadura esta muerta y rota, además el golpe de Mu me afectó bastante
—Entonces yo te llevó con el y de paso practico mis habilidades curativas que recién estoy desarrollando.
—Gracias Kiki te debo una.
El pequeño niño llevo a Shaka al templo de Mu y ambos quedaron sorprendidos; por un momento sus almas salieron de su cuerpo, Shaka corrió a donde Mu yacía inconsciente y comenzó a llorar amargamente, por primera vez el semidiós estaba llorando.
Kiki rápidamente se retiro donde la armadura de Shaka estaba y fue con su maestro, con rapidez curo sus heridas, el niño inmediatamente se sintió cansado, pero aun así continuo su labor y hasta que Mu recobro la conciencia y vio a Shaka y Kiki llorando sintió que sus fuerzas se iban de nuevo.
Shaka notó el despertar de Mu y rápidamente le abrazó con fuerza y lloró más desconsoladamente que antes, se sentía un total idiota, Kiki abrazó a ambos y Mu sintió la calidez y dolor de ambos cosmos.
—Shaka, Kiki, que sucedió porque lloran
—¿Maestro no recuerda nada?
—No, mi pequeño, estas mejor, que alivio debí tener más cuidado contigo... esperen un momento por favor díganme que no hice una locura... debo pedir una disculpa a todos.
—Mu, perdóname, perdón por ser tan arrogante, por creerme más que los demás por haberte decepcionado, por haber dejado que perdieras tu confianza en mi, infinito perdón Mu.
—No recuerdo mi enfado contigo Shaka, pero creo que es mejor así, con el paso del tiempo me e dado cuenta que soy muy rencoroso y no olvido con facilidad, así que por el motivo que sea te perdono Shaka; siempre lo haría, además eres un semidiós, si pudiste ganarte mi confianza y perdón una vez, puedes hacerlo millones de veces más
—Mu, no te merezco tu tan humilde y yo soy un monstruo, un despiadado.
—Ya, Shaka, a veces somos emocionales y decimos o hacemos cosas que no queremos, es por eso que el mantenerse serios o tranquilos en mi caso es lo mejor o en el tuyo meditar y pensar con antelación las cosas es indicado.
—Maestro, tu siempre tan sabio y maestro perdiste la memoria porque... bueno mira tus manos, tus vendas, tus ropas y la pared
Mu le hizo caso a su pequeño y quedó boca abierto, parecía una masacre, Mu enseguida reviso a sus acompañantes, no vio nada raro pero los curo con su cosmos y enseguida fue por un trapo y agua limpio todo a la velocidad del sonido y de paso se cambio la ropa y las vendas.
Shaka y Kiki sorprendidos por las habilidades de su maestro y pareja, fueron a abrazarle y Mu enseguida les correspondió.
Mu realmente estaba mintiendo, como bien le dijo a Shaka el nunca olvidaba nada o no se acordaba de algo así como así, el lo recordaba todo y mintió porque supo que todo en un principio fue su culpa y porque jamás había visto llorar a Shaka, nunca lo vio sentir dolor o tristeza, eso le removió su débil y sensible corazón y decidió perdonarlo.
Además si vivías de rencor y no olvidabas, terminabas enfermándote o convirtiéndote en eso que jurabas odiar, además, eso no era correcto y no era ser leal a ti mismo y eso es lo más importante siempre.
—Bien, ahora creo que le debemos una explicación y disculpa a todos.
Mu, Shaka y Kiki fueron donde todos estaban reunidos más de uno se asusto, menos Shion, el se metió sin permiso en la mente de Kiki y Mu y lo vio todo; no lo juzguen era la madre y abuela de esos dos carneritos no podía no meterse, además el fue el que les enseñó esa técnica tenia todo el derecho del mundo.
Los tres le contaron todo a sus compañeros y estos enseguida entendieron, Milo y Aioria corrieron a abrazar a Mu y Aldebarán abrazó a los tres, todos se unieron a ese abrazo y todos, pasaron el resto de día haciendo bromas y sonriendo porque sentían la calidez tan fuerte que Shaka, Mu y Kiki sentían.
Un par de horas cada uno volvió a su templo más tranquilo y Shion se llevó a Kiki, le enseñaría a manejar su telepatía y telequinesis ya tenia experiencia en eso con Mu, el peli violeta se avergonzó y Shaka sonrió, todo parecía haber vuelto a la normalidad.
—Entonces Mu de Aries, hemos hecho las pases después de una pelea
—Lo hicimos Shaka de Virgo, ahora vamos a reparar juntos tu armadura
—Espera, como sabes que se rompió
—Te mentí lo recuerdo todo... mira te mostrare. —La mente de Mu era realmente fuerte creo una ilusión con sus recuerdos y se la mostro a Shaka a través de la telepatía, Shaka sonrió y el inmediatamente abrió sus ojos y creo una nueva ilusión que se interpuso a la de Mu, abrió sus ojos y levanto el mentón de Mu y le miro fijamente a los ojos.
Ambos con un fondo estrellado cortesía de la ilusión de Shaka, se sonrieron y sin dudarlo se besaron y ambos haciendo uso de su levitación, hicieron de ese beso mágico y extremadamente especial para ambos.
El beso termino y ambos terminaron el día entre más besos y sonrisas, mientras reparaban la armadura de virgo, esta vez con sangre de ambos, habían hecho un pacto de sangre y besos inconscientemente.
Habían hecho las pases y ambos después de la tormenta eran felices, justo como debió ser desde un principio, lo bueno de toda esta situación fue que ambos habían hecho que su relación se fortaleciera más con esa gran discusión y se dieron cuenta de que los dos se necesitaban y querían, que si en el otro ya no eran nada y que su amor superaba el orgullo, la arrogancia, el temperamento o el rencor, ambos podían superar esas pruebas y todas las que vinieran después, porque así de fuerte era la unión de dos mentes y dos personalidades, destinadas a estar juntas.
