Día 27

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En uno de sus cumpleaños. 

Era diecinueve de septiembre el cumpleaños de Shaka de virgo, el santo y caballero más cercano a ser un dios, la pareja de Mu y el único que no celebraba su cumpleaños en compañía de todos en el santuario, Mu desde un principio supo que Shaka no recordaría su cumpleaños o que si lo haría no lo iba a celebrar o si quiera darle importancia, es por eso que Mu tuvo la idea del siglo.

Le pidió a su diosa que le ayudara a conseguir una habitación de hotel, un ramo de flores azules y anillos de pareja, Mu había escuchado de Kiki que Shun y Hyoga tenían un anillos de pareja y Mu quería tener el mismo detalle de los aspirantes a santos dorados con Shaka. 

Mu, temprano en la mañana convenció a Shaka de usar traje, el rubio no podía resistirse a la mirada dulce, brillante y cambiante ante la luz de Mu, lo que se le hizo raro al rubio fue como Mu, le tapo los ojos con una especie de pañuelo, Shaka le cuestiono y este le dijo que la curiosidad era toda una tentación y por más que Shaka se negara a abrir los ojos por su cosmos, Mu pensó que caería ante la curiosidad, por eso tomaba precauciones.

Shaka, no reclamo nada de lo que Mu hizo o dijo, solo con el cualquier niñeria o inocencia infantil le salia bien y le gustaba en otro ya estaría en el Nirvana o sin sus seis sentidos. 

Shaka juraba que llevaban caminando como diez horas, el no era de caminar mucho, solo cuando salia de misión o entraba o salia de los templos del santuario, para Shaka el escuchar la voz de Mu y la de otras personas hablar como en clave secreta le era muy frustrante y ni sabia el porque, el siempre tenia los ojos cerrados y hasta hoy eso no había sido un problema.

-Bien Shaka ya puedes abrir los ojos... -El rubio hizo caso a la petición de Mu y lo primero que vio fue una habitación de hotel con una vista preciosa, un ramo de flores azules.

-Mu... esto...

-Antes de que digas algo, si, es por tu cumpleaños, se que no te gusta, pero de alguna forma o otra quería regalarte este momento a solas los dos, además una vez dijiste que te gustaría volver a usar traje y bueno cumplí tu deseo... Espero no te molestes conmigo.

-Nunca podría arriesgarme a enfadarme contigo de nuevo, eres tan paciente conmigo que no seria capaz de hacerte eso tan cruel y me gusta que te tomaras esta molestia por mi...

-Si es así, Feliz Cumpleaños. Querido semidiós Shaka, mi novio. -Shaka sonrió y volvió a cerrar sus ojos, le dio un dulce y tranquilo beso a Mu y el peli lavanda lo llevó hasta la cama de esa habitación de hotel y Shaka aun con su traje puesto se sentó en la cama con Mu entre su piernas. 

El peli violeta, se quito su chaqueta no sin antes sacar de ella una cajita con dos anillos y un pañuelo, y soltó su camisa larga, para después acomodarse mejor entre los brazos y piernas de Shaka y hablarle.

—Shaka toma mis manos, sobre ellas hay un pañuelo con un regalo compartido... adelante tómalo. —El rubio le hizo caso al borrego y se encontró con un par de anillos, tomo las manos de Mu y las acerco a las propias y sin dejar caer los anillos, puso uno en su propia mano y el otro en la de Mu, con los anillos puestos en ambas manos, Shaka le dirigió la palabra a Mu.

—Carnerito eso que es... me estas pidiendo matrimonio...

—Son anillos de pareja y sé que por tu religión no puedes casarte o mantener relaciones sexuales, por que así lo dicta tu código, pero yo quería tener este detalle.

—Mu, yo con tan solo pensar en matar, hacer daño o pensarte como te pienso ya rompí varias de esas reglas, además, yo si quiero contraer matrimonio contigo, solo que sin tanta gente o algo grande, quiero ser el único que tenga eso de ti, el único en tu vida que sepa de que nosotros estamos casados. 

—Es curioso en un principio escogí las flores azules, porque según un libro que leí, dice que significa amor eterno y la esperanza por un amor imposible que no puede consumirse... Pero tu ahora mismo convertiste esa esperanza y amor eterno en realidad.

—Gracias, Mu, te amo tanto que a veces me aterra el pensar como termine de esta forma y que al final todo sea un sueño y esto nunca hubiera pasado.

—Si, es o llega a ser un sueño, vívelo como tu vida, diviértete, se feliz para eso son los sueños...

—Me encanta y se me hace atractivo el don y talento que tienes para la palabra, eres mi persona favorita en el mundo Mu. 

Más palabras no hicieron falta, ambos pasaron ese diecinueve de septiembre, entre palabras de amor, caricias dulces y pacientes, en total tranquilidad, cuando volvieron al santuario lo hicieron con una unión y relación más fuerte, que ambos se encargaría cada día sin falta de reforzar cada vez más.

30 días con Shaka x Mu. (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora