La Mar

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Gritarle al malva, tan incropúlozo

como aquel poso lleno de almas,

incorporar las memorias faltadas en

aquella llama, nombrar un Flamingo

entre las flamas del volcán más

ardiente, es como mirar tu corazón

"arder" como el arte de Picasso verse

perder.

Entre líneas, entre salpicadas firmas,

Puede observar, como perdías la fe en la vida, verse derrotada por la fría isla, en donde yacía nuestra Cesta maravilla.


Gritarle a La Mar; en espera de su respuesta esperé. quería tocar, sentir y expresar mi desesperación al verte caminar por la orilla, andar sin nada más, que tú mente descontrolada, me hizo desesperar.


Mi alma empezó a gritar!!, La Mar me escuchó. La Mar una metáfora me contó; "Las almas son como la tierra, Los cuerpos son como las flores, debes mirar siempre perspicaz, siendo capaz de entender entre líneas, y observar los párrafos que apunto están de borrarse, siempre debes tener en cuánta, si la tierra no se cuida, se pierde la semilla, más la flor se marchita".

Ahí comprendí lo que en "Mi" tenía que hacer, observar y creer, que no te iba a perder.

Te deje ir, "Te solté" y así pudieras ser feliz, más yo no podría aver sabido que en alguna (playa) tu felicidad yacía ahí, pues me alejé de ti pensando que pudieses ser feliz.

Al parecer me equivoqué, pues te pasa/pasó, lo mismo que Ami.

Ahora la mar, nos espera en el mar en una isla completamente sola, con aquel solar que nos arropa.

'Mientras tú finjes huir, yo finjo ser feliz'.

Cuántos tiempos tememos que dejar volar como ese refrán (el tiempo vuela, el tiempo pasa rápido) para mí el tiempo pasa lento, para mí el tiempo es eterno cuando no te veo.

Cuando te pienso el tiempo pasa deprisa como el viento, tan rápido que no puedo verlo, pues tú recuerdo es lo único que siento aquí dentro, ya que estás en otra playa, creyendo que mi alma irá a la tuya en aquel crucero.

Pues no lo creo.

Creo tantas cosas in-creíbles que parecen cuentos que no son cuentos, son inventos como el viento en primavera, como el frío en verano y el calor en invierno. Y pensar que es duradero.

Nada es certero.

Me he enamorado, (le conté a la mar)

Podría decirse) Que podría aprender amar de verdad; esa persona que en si, tuvo un día fatal, el cual el amor le marcó y le lastimó, pues veo y entiendo aquel dolor que le dolió y en el amor la fe perdió.

Pero, Nuestro amor jamás se desipó, nunca se olvidó.















Poetry SummerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora