Poetry Summer

¿Que hora es?

Eran las 6:43 un día menos cualquiera, un día menos que ayer. Un día de Julio, un día primero del mes, un día de aquel verano, en una circunstancia algo loca y en un momento algo extraño, te volteé a ver, más no te hablé y tú me miraste y helado quedé, (no lo podía creer), rápidamente mi mirada aparté, seguí con mi rumbo, seguí con mi camino en busca de mi destino...

Pero... No podía olvidar aquellos ojos que entraron en mi alma, como las manecillas del reloj entran y encajan perfectamente en los tiempos marcados por los segundos y milisegundos, no puedo olvidar ese minuto en donde nuestras almas se conectaron y pudieron tocar sus manos... Parecía que hubieran sido 100 vidas, parecía que esos segundo hubieran sido 12 horas, estando en contacto con tu mirada pude observar y entender lo que en mi nada ni nadie comprendía ¿acaso no sabías?...

Me entendiste con una sonrisa, me completaste con una mirada

Mi miedo me alejo nuevamente de tu alma, y ahora no sé si te volveré ver... Aún tengo la fe que así volverá a ser. Volver a encontrarme con ese ser, capaz de matar con la mirada, y hechizar con una sonrisa, una de esas que paralizan...

Volví al mismo lugar donde te encontré, quería volverte a encontrar, donde nuestras almas se pudieran volver a conectar...

No te encontré, decidí volver atrás, e irme sin ver aquellos ojos que anhelaba ver...

-Cuando me estaba yendo-

Pude sentir tu alma llamar, en busca de mi ser, en busca de mi nombre, pude sentir el ambiente cambiar, derrepente un arcoiris cristalino a tiempo divino pude ver, apareció en aquel hermoso lugar... Sentía que algo me seguía, pude sentir esa sensación indescriptible en aquel lago.

Cuando estaba a punto de tocar el arcoiris... Pude sentir su mano guiarse ante la mía en buscar de tocar mi espíritu... Del miedo pegué un brinco, del susto me paralice, al ver nuevamente sus ojos me calmé, y el a su rollo, me preguntó, (¿qué hora es?)..

Y no lo podía creer!!, que todo lo había imaginado, que todo estaba en mi mente, aquel bello arcoiris, pues  estaba soñando...

Cuando desperté, estaba en mi móvil, abriendo el WhatsApp, al ver, vi tu mensaje... Mientras estaba en mi cuarto, pude ver tu número +34, un número que no tenía idea de que significaría, o de lo cual sería... En esos momentos te pregunté tú nombre y me dijiste,

(mi nombre es V)

Y ahí empezó toda esta historia maravillosamente aterradora.

Y todo empezó por un, ¿Qué hora es?

Las 6:56

Ya iban a ser las 7:00, pues en el Mediterráneo la hora diferente es, en tu país eran la 1:00 mientras yo como un tonto me quedé chateando hasta el amanecer, junto a ti, no podíamos dormir, pensandonos al unísono pensando en el paraíso juntos... Sin saber que todo algún día terminaría... Pues el miedo de que acabaría llego más deprisa que las 2:53, pues ya era demasiado tarde literalmente, en tu lugar ya amaneció mientras en el mío apenas de madrugada podía sentir la pálida y abrigada saya, la hermosa luna, la que sin duda alguna duraba conmigo a tan altas horas de la madrugada a ver tu hermosa alma..

Nostalgia de verano, que pronto volverá, volverá aquella saya...