¿Es Justicia o Venganza?

Parte 18.

Había llegado por fin a Japón y estaba dispuesta a ver a Diamond a cualquier costo no me quedaría con la duda de aquello que dijo ese hombre será cierto que fue él quien asesinó a mi madre? No lo sé pero estaría por averiguarlo tome un taxi hacia el centro de Tokio baje y camine unos cuantos metros antes de llegar a su mansión era realmente bella con sus columnas talladas en marfil negro y decoradas con oro, un techo clásico de las mansiones japonesas en un bello tono carmesí a simple vista se podían contar más de cinco estructuras unidas entre si, es realmente una maravilla.

Me acerqué a la puerta y los guardias me recibieron pidieron mi nombre y el motivo por el cual acudía di el nombre que Diamond eligió para mí además descubrí mi espalda donde tenía un tatuaje en tinta roja de una luna al verlo me dejaron entrar, camine por un largo pasillo hasta  llegar a su despacho, toque dos veces y escuché su autorización desde adentro abrí y entre el al verme sonrió.

-Mi luna creciente que gusto tenerte de nuevo aquí, siéntate preciosa a qué debo el honor de tu visita —habló con elegancia y pronunciando un español perfecto cuando su lengua madre es el japonés, traía un traje blanco como era su costumbre bajo este tenía puesta una camisa azul marino y una corbata blanca igual que su traje, en su mano derecha tenía una copa de vino tinto.

-Como ya sabrás Diamond-sensei mi nana Luna falleció hace poco a manos de un matón...

-Si pequeña lo sé, y de verdad lo siento.

«Maldito mentiroso si tú fuiste quién la mando matar.» pensé para mí misma.

-Buenos pues seguí al tipo y lo hice hablar—me miró levemente como si ya supiera que era lo que estaba ir decir— me dijo algo realmente interesante ¿quíeres saber que me dijo?

-Como que podría decirte un tipo así pequeña luna esos tipos solo saben mentir—dijo con serenidad para después dar un trago a su vino.

-No creo que haya sido una mentira— menti acerca de quién me dió la información pero debiansacwrlo de su zona de confort, crucé mis piernas poniéndome comoda ésta sería una larga charla de eso estoy segura— porque lo que dijo fue que tu lo enviaste con órdenes de matarme a mi y no a nana.

-Esto te dijo?.. —menciono con cinismo y volvio a beber de su vino.

-Si además dijo, que fuiste tú quien mato a mi madre hace mucho tiempo atrás —mi tono de voz era más alto era obvio que estaba molesta y Diamante lo había notado ya que dejó su copa en el escritorio.

-Que te hace pensar que fui yo el culpable si yo fui el único que te acogió cuando estabas indefensa, te entrene y te convertí en la mujer que eres hoy —me rodeaba como un tiburón rodea a su presa pero no me iba a dejar intimidar ya no era esa niña tonta de hace 15 años así que de igual manera me puse de pie y lo encare.

-No mientas maldito, se que fuiste tú, te escuché hablando de eso con uno de tus guardias hace poco confirmando mis sospechas, creíste que por la simple razón que me diste entrenamiento te sería fiel como un perro?

-Serenity basta!

-Basta nada, mataste a mi madre frente a mi y no soy Serenity, soy Luna creciente la asesina que tú creaste y hoy cumpliré mi venganza —saque mi katana de su funda y la empuñe contra el.

-Baja eso, sabes muy bien que no puedes vencerme personalmente te entrene —hablo altanero

-Confíesalo deja de mentirme Diamond-sensei, fuiste tú quien mato a mi mamá—hable con lágrimas en los ojos y el suspiro mientras asentía.

-Si yo lo hice, debía hacerlo ella iba a heredar el mando de los Yakuza y eso no podía permitirlo el poder debía ser mío y no de ella, ella solo era la hija bastarda de mi padre y la última descendiente del clan de las lunas así que; muerta ella yo asumiría el mando y por lo tanto controlaría la región, pero no la muy estúpida tuvo que huir del país y casarse con un maldito latino para después tenerte a ti, que para mí suerte heredaste el talento de tus ancestros y me serviste mucho como mercenaria mi querida Serenity— el idiota tenía una sonrisa en su rostro.

-Eres repugnante, ¿la mataste solo por poder? Maldito! —me lancé contra el, quería matarlo, no debía matarlo grite el nombre de mi madre con todo el aire de mis pulmones, su asesino moriría aquí y ahora por fin le daría paz a su alma.

Buenas! Este es el penúltimo capítulo ya el siguiente será el final espero no decepcionarlas con el mismo.