Parte 8.

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Una semana atrás había rendido mi declaración pero no eh podido trabajar del todo ya que eh notado que tengo un agente de policía siguiéndome a todos lados quizás  aún sospechan de mi así que no puedo cumplir con mis misiones, mis días se volvieron aburridos y tediosos.

-Ya me voy nana Luna nos vemos más tarde —me despedí y salí de casa hacia la universidad.

-Nos vemos Sara —dijo ella desde la cocina.

Fui por mi ruta habitual hacia Charles R. Drew University of Medicine and Science en autobús pasé toda la mañana en el salón recibiendo las clases este día repasamos el funcionamiento interno del cuerpo humano y como mantener con vida a un paciente en caso de accidente esto me sirvió mucho ya que me dio ideas para cuándo retomará las misiones al terminar el horario escolar me dirigí hacia Otomisan Restaurant para trabajar era lo único que tenía para distraerme.

-Buenas tardes Soka-san —sonrei mientras entraba al establecimiento.

-Buenas tardes Sara-chan —me saludo con cariño mientras atendía una mesa.

- Mako-kun aún no a llegado?

-No, espero llegue pronto porque hoy tenemos mucha clientela —su tono sonaba un poco fastidiado y lo entendía había al menos 5 mesas llenas lo que serían más o menos 25 personas.

-Voy a cambiarme y de paso le llamo —me dirigí al vestidor y cambie mi uniforme de la universidad por el del restaurante, tome mi celular y llamé a Mako.

-Bueno...

- Mako-kun soy Sara, llamo para saber cómo estás ya que es raro que tú llegues tarde a trabajar.

-Ah si lo siento Sara no podré ir, mi... Mi padre desapareció y mamá esta muy triste así que no puedo dejarla ahora...

-Oh ya entiendo... Si no tienes nada de que preocuparte Mako-kun, le diré a Soka-san seguro ella también entenderá.

-Si, gracias Sara nos vemos luego.

-Si nos vemos, espero que tu padre aparezca pronto.

Mako sonaba triste y era obvio su padre estaba desaparecido, era extraño ya que según el su padre era un tipo muy humilde que jamás se metió en problemas, el hombre era inmigrante y trabajaba en una escuela como intendente seguramente no tenía ningún enemigo.

Además su hijo Mako-kun era todo un amor, estudiaba y trabajaba para ayudar a su familia con los gastos se la pasaba todo el día fuera de su casa con tal de ganar suficiente; por las tardes trabajaba aquí en Otomisan Restaurant y en las noches trabajaba en una cafetería cerca de su hogar, no entiendo como el o su familia tendrían ese tipo de casos.

Pobre y lindo Mako-kun tan guapo y joven y ahora pasando por tal desgracia. Suspiré hondo mientras trataba de entender cómo su padre se metió en ese lío; si Mako-kun era bien parecido si el quería podía trabajar en alguna agencia de modelos era alto y un cuerpo delgado pero no demasiado, su cabello rojizo natural contrastaba con su pálida piel y unos grandes ojos color avellana que enamoran. Era perfecto el tipo. En fin tengo trabajo y debo volver para ayudar a Soka-san con las mesas.

-Volvi! — dije sonriendo mientras tomaba la bandeja de comida.

-Arigato Sara-chan, iré a preparar las de más órdenes —asenti y ella se fue a la cocina.

-Ohio gusta algo más en su orden? —dije con amabilidad mientras entregue el curry en una mesa.

Negaron, y seguí atendiendo por toda la tarde ya que al ser inicio del fin de semana la clientela aumento y ni siquiera tuve tiempo para comer algo en la jornada de trabajo; ya había anochecido y los últimos clientes se habían retirado, me preparé un tazón de ramen y comencé a comer no pasó mucho cuando Sheng-sama me llamo a su oficina.

-Sara tengo una nueva misión para ti —hablo dame le la espalda a la chica.

-Pero Sheng-sama desde que fuiste a rendir declaración no a parado de seguirme un agente policial —respondi algo apenada no me gustaba rechazar una misión.

-Lo se, por eso trabajaras aquí, ven sígueme —me guío hasta el almacén entramos y después encendió la luz uno por uno las bombillas led se fueron encendiendo para dejar ver qué al final de aquella habitaciones n se encontraba un hombre atado a una silla y con un saco cubriéndole la cabeza.

-De que trata esto Sheng-sama?

-Minako y Makoto lo trajeron para ti, se sospecha que este hombre trabaja para los Whitmore y quiero que le saques información —trabaja para los Whitmore? Y quien demonios son Minako y Makoto?

-Ire a cambiarme de inmediato, pero quienes son Minako y Makoto? —pregunte con algo de recelo porque ellas o ellos estaban haciendo mi trabajo? Acaso ya no soy buena en lo que hago?

En cuanto termine de pronunciar sus nombres salieron de entre las sombras un par de chicas vestidas con un kimono blanco bordado en un hilo dorado el cual le daba un aspecto muy elegante, en sus rostros había un maquillaje similar al de las geishas y cubrían su boca con un abanico rojo. Estás se acercaron a nosotros y nos hicieron reverencia.

-Nuestra señora Luna creciente, somos aspirantes a su puesto usted debe conocernos como Estrellas del firmamento; hemos sido enviadas por parte de Diamond-sensei, nuestros nombres usted ya los conoce somos Minako y Makoto estamos aquí para aprender de usted, mucho gusto —parecian máquinas hablaban y se movían de la misma manera era algo tétrico de ver. Fuera de eso algo que no me gustó mucho fue que se presentaron como Estrellas del firmamento eso quería decir que en poco tiempo iban a suplantarme.

-El gusto es mio, será un placer recibirlas —force la sonrisa más amigable que pude pero no lo logré. Me molestaba bastante que esas niñas estuvieran aquí...

¿Es Justicia o Venganza?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora