Miro las estrellas

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Y aquí estoy...Tumbada en la cama con los auriculares mirando hacia el techo de mi habitación. Las luces están apagadas, es de día pero las cortinas están echadas, no me gusta la luz del sol...

Miro las estrellas del techo, esas que se iluminan en la oscuridad, esas que protegen a los seres que temen a la oscuridad aunque yo no sea una de esas... Estoy tumbada sobre una cama que siento que perfectamente podría ser una tabla de hielo, mi almohada a desaparecido y yo sigo mirando las estrellas.

Muchas cosas pasan por mi cabeza en este momento, pero solo la música es mi compañera....Quiero gritar, pero las paredes me asfixian demasiado como para siquiera poder intentarlo, me siento encerrada por mi misma porque si quisiera ahora mismo podría salir pero hay algo que me encierra, hay algo que ha hecho que cambie...Hay algo que hace que piense distinto, que me encierra junto con unos sentimientos de ira, mentira, frialdad...No soy yo, pero parece que no me importa porque sigo mirando las jodidas estrellas, unas estrellas demasiado brillantes que hacen que me maree, pero que ni por esas puedo apartar mis ojos de estas estrellas...

Me siento atrapada pero me encantaría saber porque, me encantaría poder salir de esta cama y correr...Demasiados sentimientos encontrados, demasiado dolor y demasiado sufrimiento...¡Por favor que pare!

La música suena a través de los auriculares pero irónicamente ni siquiera la escucho, trato de intentar cambiar de posición pero soy incapaz de mover mis articulaciones...¿Qué me pasa? 

Un momento...Conseguí cerrar los ojos pero al abrirlos me encontraba en otro lugar, donde se podían ver bien todas las estrellas, parecían más grandes y se estaban comunicando conmigo...Me sentía en paz pero no satisfecha...

Lo comprendí...Ese sentimiento que sentía antes era lo que la mayoría de seres humanos sienten, esa sensación de reprimirse, ese sentimiento de querer salir corriendo pero que lamentablemente por el solo hecho de querer salir corriendo, la mayoría de gente piensa que es una acción cobarde. Desde que naces hasta que mueres, tienes que demostrar algo a cada persona que te rodea: que eres el más valiente, el más inteligente, el más exitoso...Nuestra vida se basa en demostrar lo que valemos pero...¿Por qué no solo intentamos ser felices? ¿Por qué siempre nos ponemos barrotes? ¿Por que la mayoría de personas que conocemos intentan cortarnos las alas...?

Así viví yo durante mucho y aquí estoy... No he podido hacer nada que yo realmente quisiera porque nunca fui libre, siempre atada de pies y manos por la sociedad...Siempre consumida pero nunca realizada porque nunca he sido realmente feliz. 

Te doy un consejo...No hagas lo mismo que yo. Sé feliz y aunque no sea muy fácil, busca la manera, libérate, cierra los ojos y vuela...Valdrá la pena.

Mi diario compulsivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora