Cuando iba yo a montar ese caballo rudo
y tembloroso, dije: «La vida es pura y bella».
Entre sus cejas vivas vi brillar una estrella.
El cielo estaba azul y yo estaba desnudo.Sobre mi frente Apolo hizo brillar su escudo
y de Belerofonte logré seguir la huella.
Toda cima es ilustre si Pegas o la sella,
y yo, fuerte, he subido donde Pegaso pudo.Yo soy el caballero de la humana energía,
yo soy el que presenta su cabeza triunfante
coronada con el laurel del Rey del día;domador del corcel de cascos de diamante,
voy en un gran volar, con la aurora por guía,
adelante en el vasto azur, ¡siempre adelante!
ESTÁS LEYENDO
Poemas de Rubén Darío
PoetryFélix Rubén García Sarmiento, conocido como Rubén Darío, nació en Metapa, hoy Ciudad Darío, Matagalpa, el 18 de enero de 1867 y murió en León, el 6 de febrero de 1916. Fue un poeta, periodista y diplomático nicaragüense, máximo representante del Mod...