Serendipia

amor a primera vista

Cuando acabé fui dándome un paseo hasta el puerto, como siempre llevaba mi libreta y mi lápiz pero cuando llegue vi algo que no me esperaba ver. Julene, otra vez ella, parecía que me perseguía o algo. Sí, quería ser mi amiga pero no sé,¿ como sabía que yo iba a volver a ir?
-Hola de nuevo, parece que me estas siguiendo- dijo entre risas.
-Disculpa, la que me está siguiendo eres tú, yo vengo aquí desde que tengo uso de memoria- dije, esta vez sí reí, pero era de verdad.
-Bueno pues siento si te incomoda que te "siga"- está chica me caía muy bien
-¿Oye y qué es de tu hermano? me lo tendrás que presentar algún día ¿no?- hay que aprovechar cada momento
- Si quieres podemos ir a verle, está jugando a fútbol en el campo que está a menos de 1 km de aquí- dijo sonriendo
-Mírate si ya parece que te conoces el pueblo mejor que yo- dije riendo
-Sí bueno Pablo me lo enseñó ayer, ¿sabes quién es no? Pablo el que vive en la casa de al lado, en la casa roja- dijo orgullosa
-¿Pablo? ¿conoces a Pablo? ¿de que?- Pablo era mi amigo de la infancia, recuerdo que siempre iba a su jardín a jugar con su perro. Eramos muy buenos amigos y no digo que no lo sigamos siendo, pero él decidió tomar otro camino. Seguimos hablando y a veces quedamos para contar nuestras cosas y nuestros problemas, pero ya no nos llevamos tanto como antes. Simplemente él ha cambiado, digamos que ahora es uno de esos malotes, por así decirlo, así que decidí alejarme de ese mundo, pero aún así me sigo llevando con el.
-Sí, su padre solía trabajar con mi padre y alguna que otra vez he hablado con él, un par de veces vino a mi casa, no la de aquí sino la de donde vivía antes.-
-Bueno vamos a dejar de enrollarnos que yo quiero ir a ver a tu hermano- dije. Esto se estaba poniendo muy intenso.
Nos levantamos y caminamos en silencio, cosa que yo agradecí, pero pensé que iba a ser imposible con esta chica. Y cuando llegamos, él estaba ahí jugando a fútbol, justo sonó el silbato de que se acababa el partido y un par de chicas se acercaron a él, a abrazarle y decirle que lo había hecho genial. Julene llamó a su hermano, y el un poco sin saber que hacer optó por venir hacia nosotras.
-Hola hermanito, te presento a mi conocida-
-Como que conocida? Eres mi amiga julene- la dije mientras la di un abrazo. Quizás así, podría gustarle a su hermano.
-Hola, soy kenai- Madre mia que voz más hermosa tenía.
-Hola me llamo Maddelein pero puedes llamarme maddi- guau, era la primera ves que le decía mi nombre a una persona recién conocida.
Para mi sorpresa kenai extendió la mano, yo se la di y me dio dos besos uno en cada mejilla. Ese chico era encantador.
-Tenemos que quedar algún día, sin que mi hermana la pesada está delante eh- dijo riendo
-Cuando quieras. Puedes venir a buscarme, Julene te dirá dónde vivo.- Maddelein que haces, por que dices eso, ¿Y si es un violador? ¿Y si te rapta?