DESEO

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Fui a casa de Julene y le intente contar todo. Lo que paso con todas las que han estado con Pablo, pero parece que le dio exactamente igual

-¿Porque debería creerte Maddelein?-

-Por favor Julene no tienes ni idea de lo que ese chico es capaz de hacerle a las chicas-

-A ver sorprenderme-

Le conté todo lo que le hizo a mi hermana

-Lo siento por tu hermana pero tengo que decir que fue un poco gilipollas, si ves que no te quiere deja de intentarlo-

-Va  Maddi vamos, te llevo a casa- Ahora el que hablaba era Kennai

- No hermanito tu con esta loca traidora no vas a ir a ninguna parte-

Pero sin mirar atrás me cogió de la mano y me abrió la puerta del coche . Una vez que estábamos en casa, no pude resistirme y no se porque me puse a llorar. No aguantaba esta situación y casi se me olvido que Kennai estaba ahí. Él no pregunto mucho solo vino a donde mi y me dio un abrazo. Tenía algo de comida en la nevera y me preparo una pizza. Le dije que se quedara en casa esa noche, no quería estar sola. Estuvimos viendo el diario de Noah y comiendo pizza hasta que creo que me quede dormida porque no recuerdo nada mas. Solo que me desperté a las 5 de la mañana en mi cama, supongo que Kennai me llevo allí. Él estaba en el sillón que había al lado de mi cama. Me estaba mirando.

-Que miras- dije medio riendo

-Eres preciosa-

-No digas gilipolleces- y me reí y el me devolvió la sonrisa- Anda ven aquí- dije señalando el otro lado de la cama

-¿Segura?- asentí y se tumbo a mi lado

-¿Puedo abrazarte?-necesitaba sentirle cerca

-Claro pequeña-

-¿Porque no te metiste anoche en la cama?- 

-Te deseo Maddi pero esta noche no podía hacerlo, solo quería que descansaras-

y sin pensarlo le besé,me besó, nos besamos con pasión, con amor, con ganas pero no hicimos nada más, después de eso le abracé y nos dormimos

SerendipiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora