En la ciudad de Nueva York, vivía una familia peculiar formados un artista marcial hamato Yoshi su mujer tang shen y sus cuatros hijos adoptivos tortugas mutantes adolescentes, (Leonardo, Rafael, donatello y Miguel Ángel) en una vieja casa con un patio lleno de árboles frutales.
El día de halloween la familia decidieron viajar a un pueblo al sur de América, clima tropical era ideal para pasar las tardes de los fines de semana, sentados en el patio comiendo frutas.
Fue en una de esas tardes cuando los cuatros hermanos, lo vieron por primera vez; era un hombre alto, con ropa vieja, cara arrugada, y lo que más llamó su atención: un ojo verde y otro azul.
El hombre caminaba con paso lento y silbaba una melodía que a los cuatros hermanos le parecía fascinante y a la vez aterradora.
– ¿Quién es ese señor? – preguntó Leonardo a un residente del pueblo.
– Le decimos Saki el silbón, pero la verdad es que nadie sabe su nombre – respondió su tía y prosiguió–. Llego hace años al pueblo. Solo. Se instaló en una casita fuera del pueblo y se cuentan muchas historias sobre él.
– ¿Sí? ¿Cuáles? – inquiere un curioso Miguel Ángel.
– Muchos dicen que se convierte en lobo en las noches de luna llena. Otros dicen que se alimenta de los niños desobedientes que no se acuestan a dormir temprano. Y otros dicen que vaga en las noches silbando por las calles y si alguien se asoma a ver quién es, se muere.
Mikey corrió a buscar a su mamá para abrazarla y desde entonces, se escondía cada vez que veía pasar a aquel hombre.
Una noche, ya pasadas las 11, Mikey seguía despierto a pesar de que sus padres le había mandado a dormir más temprano sus hermanos dormían plácidamente.
mikey jugaba a oscuras con su game boy, cuando de repente escuchó el silbido del hombre de los ojos de colores. Sintió un frío que le recorrió todo su cuerpo y casi lo paralizó. despertó a sus hermanos gritando.
- leo, rafa donnie -. grito mikey.
- ¿qué pasa?- preguntaron los tres sobresaltados.
- Escuchad -. respondió mikey.
Estuvieron atento unos segundos pensando que tal vez mikey se había confundido pero ahí estaba de nuevo esa melodía.
los cuatros hermanos Se quedaron callado casi sin respirar y escuchó a los perros de su calle ladrando, como inquietos.
De repente escucharon unos pasos cerca de la puerta de su casa y un silbido. rafa Tuvo la tentación de asomarse pero recordó lo que dijo el residente del pueblo que le había contado sobre el destino de quienes se asomaban y prefirió no hacerlo.
Al cabo de un momento los pasos se alejaban y el sonido del silbido también. Pero escucharon el grito de uno de sus vecinos pidiendo auxilio. Además, sonó el aullido de un lobo.
A los poco minutos, algo empezó a arañar la puerta, como intentando entrar con fuerza, además se escuchaba algo olfateando. donnie se acostó en la puerta para que a aquella cosa le resultara más difícil entrar.
La puerta parecía que cedería y se caería, cada vez se movía más. Entonces los cuatros hermanos se fue a esconderse a su cuarto, gritando y pidiendo ayuda.
Cuando sus padres aparecieron, los cuales estaban preparando la cena, los arañazos en la puerta dejaron de escucharse.
Al día siguiente, todos comentaban sobre la repentina muerte de un vecino, el señor Ramirez. Tenía señales de zarpazos por todo su cuerpo. ¿Sería de un hombre lobo?
Desde ese fin de semana, los cuatros hermanos no volvió a ver al hombre de los ojos de colores.