𝐒𝐀𝐒: 𝐏𝐄𝐑𝐅𝐄𝐂𝐓𝐎 [+18]

✦┆O38: Jimin

Después de mi cautivador beso con mi mejor amigo, Kook me sujetó del saco llevándome a rastras a mi oficina a pesar de mi quejas mientras éramos seguidos por mí aún sorprendida secretaria.

—Ustedes dos —Dijo Jungkook señalandonos. — Sentados

—Pudrete —Dije cruzando me de brazos.— No soy un maldito perro

—Con una mierda, has lo que te digo Park

Jungkook me miró furioso y me obligué a obedecer sus órdenes a pesar de que detestaba que la gente me dijera que era lo que tenía que hacer, con pereza tomé asiento junto a mi secretaria en el enorme sofá de cuero.

—Tienen cinco malditos segundos para explicarme que acaba de suceder

—No es de tu incumbencia —Respondí indiferente.— ¿No tienes trabajo que hacer?

—¡Por supuesto que es de mi incumbencia! —Exclamó.— Acabas de besarme frente a todos sin razón alguna

—Lo siento mucho Vicepresidente Jeon —Dijo mi secretaria interviniendo.— Esto fue mi culpa

—¿Su culpa? ¿A qué se refiere?

—El presidente Park y yo hicimos una apuesta, quien perdiera besaría a su mejor amigo frente a todos, lo siento de verdad.

—Entonces supongo que está bien —Rio.— No es la primera vez que hacemos esto, todos nosotros solemos hacerlo cada vez que...

Abrí mis ojos con sorpresa y cubrí la boca de Jungkook antes de que dijera algo más, cada vez que los chicos nos reunimos para beber terminabamos por cometer locuras que nadie más debía saber por lo que todos habíamos prometido mantenerlo como un secreto hasta que nos volviéramos polvo, escuché como mi secretaria dejaba escapar un jadeo ante la confesión de mi mejor amigo y yo no podía sentirme más avergonzado por ello.

—Será mejor que salgas de aquí antes de que te despida —Susurré amenazante.— No quieres eso ¿o si?

—Creo que debería irme —Rio nervioso.— Olvidé que tengo mucho trabajo esperándome

Fue lo último que dijo antes de salir huyendo de mi oficina, dejé escapar un suspiro y me giré hacia mi secretaria que miraba sus uñas como si fuera la cosa más interesante del mundo.

—¿Secretaria Kim?

—Creo que yo también debería irme

—Pero antes debemos dejar las cosas claras entre nosotros —Dije con seriedad.— No puedo seguir negando lo, estoy enamorado de ti —Haerin volvió a ruborizarse, tomé sus manos y la acerqué a mi.— ¿Quisieras oficialmente salir conmigo?

—Yo...

—Entiendo que me comporté como un imbécil contigo el viernes así que entiendo si te has arrepentido de lo que sientes por mi...