CAPITULO VEINTICINCO

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CAPITULÓ VEINTICINCO

NARRA FREYA

— arrastrará el espíritu de Davina a un círculo— murmuro — mientras esté allí, los ancestros no puede atormentarla, con este les conseguiré algo de tiempo para que logren encontrar una manera de resucitarla, pero... tendré que canalizar a uno de ustedes, Elijah y Nik, piedra, papel o tijeras

Nik gruñe y Elijah está apunto de Dicker algo cuando las velas a nuestro alrededor se encienden

—esto no puede ser bueno— murmura Elijah retrocediendo

— mi sistema de alarma— les explico— creo que una bruja de Nueva Orleans está intentando meterse con alguno de ustedes

— Lucien tiene al nuevo regente a sus órdenes— murmura Nik tensó— viene por mi

En un solo instante la pintura de Rebekah se incendia

— no...— susurre tensa— va por Rebekah

(...)

NARRA EVELYN

— claro que todo está perfectamente— salgo del auto

— ¿segura? ¿Como van las cosas por allí?— pregunta Elena preocupada

— calmadas— me encojo de hombros restándole importancia— te estás preocupando de más, estoy bien

— no lo sé, es un mal presentimiento— me avisa

— deben ser suposiciones tuyas— añado obvia— todo está muy bien

— te voy a creer por ahora

— lo que digas— cuelgo la llamada y abro el maletero

Allí se encuentra una mujer amordazada, sujeta de manos y piernas

— tu eres la nueva regente, ¿verdad?— ella me mira asustada— las brujas normalmente me caen bien, oh bueno, las que no intentan lastimar a mis amigos

La tomó del pelo y la sacó a rastras

(...)

NARRA FREYA

— no contesta— gruño exasperada volviendo a marcar al número de Evie

— sabes que está pasando por un mal momento— me dice Elijah— ahora mismo piensa que todo a su alrededor se desmorona, puede que esté comentiendo una locura

— tenemos que detener esto— sentenció —la única forma de obtener el poder que necesito para matar a Lucien es usar a Davina

Y usándola... los ancestros tendrían libertad de romper el círculo donde se encontraba

Él se mantiene pensativo unos momentos antes de asentir

Caminamos hacia la sala donde el espíritu de Davina mira con dolor a Marcel, está en medio del círculo

— esto no ha sido culpa tuya, ni la de Kol— le indica ella reteniendo las lágrimas— los ancestros me odian por las decisiones que he tomado, no soy una niña. No soy tu responsabilidad

— cariño, siempre serás mi responsabilidad— le dice con dulzura Marcel

— ¿que se suponía que tenías que hacer?— cuestiona ella— ¿encerrarme en el ático y mantener al mundo alejado de mi para siempre? No me has defraudado, simplemente crecí, gracias por salvarme la primera vez y lo que vino después... te quiero Marcel

— yo también te quiero

Elijah se mueve con rapidez y retiene a Marcel lejos de Davina

— lo siento Marcel — le pide mientras me da la señal para continuar

1.HUMANIDAD -THE ORIGINALSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora