Capítulo 9: Las sospechas de Seulgi

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Mierda.

Todo seguía igual. Esos días Moonbyul había intentado hablar con Wheein pero no sabía ni cómo sacar el tema. Y tampoco sabía qué decirle, y seguramente si ella no había dicho nada y fingiera que todo era normal era justamente porque no quería que nadie lo supiera. Aunque todas esas cosas rondaban su mente, había decidido seguir el consejo de Yongsun y dejar que las cosas siguieran el curso que tuvieran que seguir.

Pero ahí teníamos otro gran problema, Yongsun.

Yongsun

Holi, tengo una hora libre así que he decidido pasar por tu facultad para hacerte una visita. Y también si quieres podemos ir a comer juntos.

Un mensaje que se suponía que tenía que hacerle super feliz le estaba dando un ataque de ansiedad enorme. Qué se suponía que tenía que hacer. Lo más gracioso de aquello era que esa clase que tenía libre era la que compartían. Estaba seriamente replanteándose el cambiarse rápidamente en el baño y salir corriendo a donde quisiera que estuviera la facultad de mates. Pero era una estupidez y ni si quiera llevaba hoy el disfraz.

Yool

Heey, lo siento pero ya estoy en mi casa, hoy solo tenía dos horas. Sin embargo, me gustaría aceptar esa invitación para comer.

Puede que no fuera un genio del engaño, pero no se le estaba yendo mal. Creía.

Yongsun

¡Perfecto! Nos vemos en tu cafetería, esta vez me toca a mí elegir el sitio y es: sorpresa.

Cómo pretender no sonreír cuando hablaba con ella si le decía ese tipo de cosas. Seulgi estaba todo el rato observando cómo su amiga miraba con cara de estúpida a su móvil y vigilaba de que no se chocara con nada.

―Puedes hablarle a tu novia más tarde, cuando no estés caminando entre la gente, por ejemplo.

―¡No tengo novia! Y perdona, es que he quedado y tengo que darme prisa.

Claro, Solar iría directamente, pero ella tendría que pasar por casa para cambiarse, menos mal que el punto de encuentro estaba al lado de su apartamento. Aun así, tenía que darse mucha prisa y sabía que coger el bus no iba a ser de mucha ayuda. Seulgi seguía observando a su amiga pensando en que era un poco rara, parecía concentrada en llamar a alguien, seguro que se había vuelto a olvidar de su presencia.

―Byul se puede saber qué haces llamándome, estoy en clase. ―Hwasa había salido al pasillo a contestar a su amiga. Nunca la llamaba y menos si sabía que estaba en clase, así que podía ser algo importante.

―Hwasa, por favor, necesito que me lleves a casa lo más rápido que puedas. ―Al oír aquel nombre Seulgi levantó las cejas. Definitivamente la otra se había olvidado por completo de su existencia.

―¿Qué parte no has entendido de que estoy en clase? ¿Y se puede saber qué es tan urgente? ¿Se está quemando nuestro piso?

―Por favor, venga, si te saltas continuamente clases, te lo explicaré por el camino y te compensaré con lo que quieras.

―¿Con lo que quiera? ―Escuchó que su amiga respondía afirmativamente. Era tentador, en un segundo pasaron tantas propuestas por su mente.― Está bien, espérame delante de tu facultad, estoy ahí en 2 minutos.

―Gracias, gracias, eres la mejor amiga del mundo. ―Pero la mejor amiga del mundo colgó antes de seguir escuchando más halagos.

En literalmente 3 minutos después, apareció el coche de Hwasa justo delante de Moonbyul, y Seulgi que seguía siendo un poco ignorada por su compañera. Byul se montó rápidamente en el asiento copiloto.

Don't lie [MOONSUN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora