Capítulo 10

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[Narradora]

Siendo las 11:30 de la mañana, Perú procedió a servirle primero a Luchito, porqué se lo merecía.

-Mi luchito, ten come tú primero -Exclamó el peruano, mientras le servía su pollada, con ajicito y todo. Al cansado lucho. -Y tómate una cervecita bien elena, para que dejes de verme molesto.

Lucho levantó una ceja indignado, mientras se sentaba para comer.
Al parecer Perú no tomaba en cuenta que él solo era un vendedor, no un esclavo o mayordomo salvador.

-Gracias -Dijo con resignación, total ya se estaba acostumbrando al peruano y a su forma de tratar.

Perú sonrió alegre, pues todo ya estaba listo, gracias a lucho y a los demás.
Con espátula en mano, volvió a freír los pollos con Bolivia. Claro que el ambiente estaba muy alegre.

-Lloro, por quererte, por amarte, por desearte -Cantaba Perú con sentimiento, mientras servía otra pollada para el mexicano.

México bajo de su improvisado escenario y se sentó junto a Lucho, para comer.

-¡A ver si cocinas tan rico como yo! -Exclamó retador, mientras veía al peruano que terminaba de servirle y se le acercaba.

-Créeme lo hace, y mucho mejor que tú -Contestó Lucho, mientras miraba al mexicano con una sonrisa.

-¡Esé es mi Luchito Csmr! -Comentó el peruano con alegría, ya junto a ellos -Ten Méx y prueba este simple pollo preparado por tu servidor, que te hará querer más~

-Órale pues -Respondió el mexicano, para luego morder un poquito el pollo y darse cuenta qué el Peruano podía transformar un insignificante pollo, en una delicia.

Perú sonrió con egocentrismo al ver las expresiones del mexicano, le encanto su pollada.

-Son 12 soles Méx, Lucho -Comentó mientras los miraba con burla -Nada es gratis en esta vida~

-¡¿Nos estas cobrando, después de que te ayudamos?! -Gritando los dos juntos, indignados.

Una risa estruendosa dio el peruano, mientras negaba con la cabeza.

-Es bro...-Se vio interrumpido por el boliviano, que le jalo del brazo y le entrego su billetera.

-Y-yo te pago ahorita, pero -Musito con vergüenza, mientras agachaba la cabeza -C-comemos los dos juntos.

Perú se llevó la mano al pecho y fingió limpiarse una lágrima, para después acariciar la cabeza del Boliviano.

-Es broma, ustedes me están ayudando -Mencionó mientras le devolvía su billetera a Bolivia -No soy tan care palo pa' cobrarles. Pero a los demás si lo haré, tengo que recuperar mi inversión, ¿Si o no? Lucho.

-Por supuesto, tienes que pagarme -Contestó Lucho, mientras sonreía.

Después de esa pequeña plática, cada quién se encargó de lo suyo. Y si, lucho se quedó para repartir las cervezas. Mientras Perú y Bolivia freian los pollos y México comenzaba a probar su micrófono.

-¡Probando 1,2,3 Probando! -Comenzaba hablar el mexicano, subido en su escenario improvisado. ¡Hey ustedes, vengan aquí. Si ya te vi Venezuela ven aquí! Tu también Argentina -Gritó, mientras veía a los dos países desde lejos.

Los dos mencionados caminaron hasta los demás y saludaron a Perú.

-Vene siéntate a tragar -Exclamó el peruano, mientras lo jalaba del brazo junto al Argentino y los sentaba en la mesa. -Boliviana pasa los pollos.

El boliviano rápidamente sirvió todo y lo llevó hasta Perú.
El peruano les dio su pollada a cada uno y sonrió.

-Siéntanse libre de comer todo lo que quieran -Exclamó con alegría pues esa era su naturaleza, él ser amable y dadivoso.

¡¡Odio el Amor!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora