11. ¿Conexión?

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ChangBin suspiró mientras pasaba suavemente sus manos sobre el rostro del australiano. Félix se había quedado dormido sobre su pecho, se veía tan tranquilo, su respiración era acompasada y de cuando en cuando le hacía cosquillas en el dorso de la mano, si sería por él se quedaría toda su vida contemplando aquella hermosa escena frente a sus ojos, pero seguramente Félix despertaría con hambre y él ya tenía un poco, así que, de la forma más delicada que pudo se deshizo del agarre de Félix (con mucha dificultad ya que éste lo abrazaba por la cintura), caminó de puntillas hasta llegar a la puerta, una vez allí, la abrió lentamente para evitar cualquier chirrido y finalmente estuvo fuera. Sin embargo, cuando volteó con intenciones de ir a la cocina, algo le cayó en el rostro dejándolo anonadado por eso

-que ...

-¡así te quería agarrar, idiota!- frente a él, un niño pelinegro vestido con el uniforme de la secundaria sostenía uno de los cojines del sofa

-¿quien ...

-¡cómo pudiste, maldito delta!- el niño parecía realmente molesto, bufando y sus ojos brillando por la cólera

-¿que estás ....

-YAAAAAAAAA- con un grito, el pelinegro se abalanzó sobre él, golpeándolo con el cojín tan fuerte como podía

-ChangBin ... - la voz temblorosa de Félix se hizo presente, tenía lágrimas en sus mejillas y su labio inferior temblaba- Jeong ... JeongIn- al ver la escena que se armaba en su sala no pudo evitar llorar como un niño pequeño- ¡ChangBin!- llamó justo antes que JeongIn le tirara otro cojín en la cabeza al delta

-¡QUE MIERDA LE HICISTE!- gritó iracundo- ¡POR QUÉ CARAJOS FÉLIX ESTÁ LLORANDO!- añadió mientras asestaba golpes al delta

-¿que pasa aquí?- la voz de Chan se hizo presente, pero nadie pareció notarlo, Félix seguía llorando como un niño al que le acababan de quitar un dulce, hipaba y limpiaba su nariz con la manga de su pijama de ositos; frente a él, JeongIn no paraba de asestar golpes en la cara de ChangBin con los cojines mientras soltaba insultos a diestra y siniestra; mientras tanto, el último, simplemente estaba desesperado por llegar al lado de cierto rubio y consolarlo.

-¡silencio!- la voz de mando del alfa llenó la sala y todos los presentes se quedaron inmóviles, sorprendidos- levántense ahora- ordenó Chan con la misma voz, a pesar que la voz de mando no hacía efecto ni en JeongIn ni en ChangBin, ambos se levantaron lentamente, aún sorprendidos por su reacción- se sentarán y me explicarán qué diablos pasó aquí- ordenó, ambos pelinegros empezaron a caminar lentamente hacia los sofás, sin embargo, el pequeño gemido que soltó Félix hizo que ChangBin se pusiera en alerta y rápidamente corrió al lado del gamma

-vuelve a utilizar tu voz de mando- dijo en un tono amenazador mientras el tono de sus ojos se volvía ligeramente magenta y envolvía el tembloroso cuerpo de Félix en sus brazos- vuelve a utilizarla y vas a ver de lo que soy capaz

Mierda. Chan había olvidado completamente que entre ellos había un gamma, si para los omegas la voz de mando de un alfa era un golpe en el estómago, para los gammas eran golpes en cada centímetro de su cuerpo, cedían al instante, sin ser dueños de sus acciones, era obvio que ChangBin saldría a la defensa de su gamma ... ¿ya era suyo? Por su reacción podía decirse que sí, Chan se quedó un par de segundos analizando cada detalle

-¡quien te crees para amenazar a Chan!- salió rápidamente el pequeño (de edad) en defensa del alfa

-bien- al escuchar otra vez esa voz, el delta no pudo evitar gruñir- calmémonos todos, primero díganme que hacían ustedes peleando, JeongIn

-¡primero que te responda él por qué Félix estaba llorando!- gritó JeongIn mientras señalaba acusadoramente al delta

-¿Félix?- Chan cuestionó con la mirada al contrario, que estaba próximo a volver a las lágrimas

Alfa & omega ... ¿Delta & gamma?// CHANGLIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora