Verlo tan azorado me dio tanta pena y dije usando un tono de voz muy dulce y llena de amor. -Yo te ayudare, confía en mi. intentando calmarlo un poco, lo senté en un diván que estaba junto a la cama y comencé a desvestirme ante él... dejé caer mis ropas, camine lento como una fiera en cacería de su presa, al acercarme él me tomo por ambas manos aprisionándolas por detrás de mi trasero, apretando un poco y quedo en un estado fuera de si, como hipnotizado, se notaba la lucha que estaba debatiendo entre él mismo, pues no sabia si seguir o detenerme, pero yo continué, de nuevo tome su rostro entre mis manos y me apoye para sentarme sobre él y una vez arriba comencé a besarle con muchas ansias de sacarle el alma ¡a sorbos!, yo desee por todos esos años estar así y era ¡mi momento!, él solo me veía totalmente incrédulo, tal vez pensaba: "Esta es la niña de alma pura, que escogí?, o ¡esta poseída!" pues su cara lo decía todo, era claro que me estaba desconociendo...
Me detuve un instante y el apretó mis nalgas, tal vez pensó que pararía o me arrepentiría. -No me iré. dije sonriendo libidinosamente y me levante para llevarlo a la cama y dije: "Hazlo, confió plenamente en ti." ...Y me recosté a mitad de la enorme cama, él se abalanzo sobre mi y comenzó a besar cada espacio de mi cuerpo tomándose su tiempo para poder explorar el cuerpo que yo le estaba obsequiando.
Al llegar a mi parte, sabiendo que era pura enloqueció, me miró directo a los ojos y sostuvo mis muñecas de ambas manos como para evitar que huyera y me penetro ¡brutalmente! no le importo si era mi primera vez, y le valió un bledo la delicadeza con la que me trato anteriormente, él me hizo de su propiedad con tal reclamo que ni yo misma pude protestar, el dolor era demasiado intenso, sentía como mis entrañas eran tomadas con tal fuerza y poderío! su manera tan violenta me excitaba irónicamente cada vez más, le decía en voz baja "¡Soy tuya! ¡Soy toda tuya!, para tratar de controlar sus arranques de impetuosidad, a la vez era tal la situación, como si me tuviera bajo un hechizo, de pronto busco con la vista el resultado de su acto carnal y al ver sangrar mi vagina...
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de inmediato esa escena despertó su lado animal, sus ojos brillaron como el mismo fuego del infierno, sus colmillos brotaron de un instante y con una sonrisa maquiavelicamente seductora... Busco el punto exacto en mi cuello y sin pensarlo ni un segundo clavo sus colmillos tan profundamente que yo deseé huir intentando soportar el ultraje, desgarre su espalda pidiendo desde mis adentros que Se detuviera!, ¡que realmente me estaba haciendo daño! Mis lágrimas brotaban sin cesar y empecé a sudar pues sentía la muerte cerca.
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De pronto un calor se apodero de mi, entro desde mis pies hasta la punta de mis cabellos y ya no pude detenerlo tuve un tornado de orgasmos que me fue imposible detenerlo, ¡al contrario!, fue ¡el éxtasis total! quería morir ya no se si de placer o de dolor pero de cualquier manera esa muerte seria lo mejor que pude haber tenido, ¡vaya ironía, una virgen muriendo en pecado!, ni como defenderme en los cielos, cuando yo misma lo pedí a gritos así...
