cap 3

3.3K 350 17
                                    

Al mirarlo me sentí miserable a decir verdad ya que nunca me considere alguien débil hasta que el mazo de cartas que tenía se voltearon en mi contra quedando sin alguna protección.

– hola... No te mire a la salida y me fui.

– tranquilo no hay problema de todos modos acompañe a Peggy...

– entonces adiós...

– no espera Tony últimamente estás raro que te pasa te miro algo enfermó.

– no me pasa nada Rogers así que sigue tu camino quieres?

La verdad no tenía ganas de hablar con el ya que no quiero arrepentirme de la decisión ya tomada después de todo no es su culpa ya que cada quien elige como sentirse aún que a veces sea inevitable.

– no quieres que vayamos a tu casa es decir... Tu siempre me cuidas cuando me meto en una pelea y...

Mi coraje subió y simplemente le solté mi verdad del momento.

– escúchame Rogers yo ya no quiero darte mi atención en ningún aspecto así que ya no quiero ser tu maldito chef, médico o tu psicólogo por que aún que yo mismo me gane este tipo de momentos ya no quiero nada por el estilo si quieres atención médica ve a un bendito hospital o con tu querida Peggy.

Se que lo dije con cierto rencor encontrado así como se que solo escupí veneno pero simplemente en cierta forma quiero que me odié para que cuando me encuentre como un maldito recipiente no le duela tanto como a mí me va a doler.

Él me miró yo por su olor pude detectar que se sentía triste así como sus ojos que antes eran dos grandes gemas color celeste estaban empañados por un color más oscuro... Vacíos.

no puedo tolerar más estar en escena corridas a mi casa y me encerré en mi cuarto.

A las cuatrocuando mis padres volvieron de trabajar me preguntaron elección yo simplemente son fingir una sonrisa y les dije.

– me me vendría tan mal pasar por el bisturí no?

Ellos se quedaron atónitos.

– prefiero "morir en vida" solo dejándome un pequeño hueco en mi interior al morir físicamente y dejarles a las personas que de verdad me aman un hueco enorme.

Mi madre lloraba y me dijo que todavía va a estar bien mi padre me miró sin comprender las palabras antes dichas pues me conoce también que sabía que no iba a aceptar eso tan rápido aunque sé que internamente está muy feliz ya que era su único hijo después de todo.

Cuando es por fin se marcharon para contactar con el cirujano para decirle que mañana mismo irían exhale y miré por la ventana cuando de repente sentir cómo me quedaba sin aire.

Corrí hacia el baño y eche lo que me  asfixiaba para después sentir las heridas provocadas por las malditas flores en mi garganta y tráquea.

Ahora que al fin las miro mejor puedo detectar el porque de su color y simplemente rio amargamente.

Para finalmente quedar inconsciente al cabo de unos minutos haciendo que pequeños fragmentos de recuerdos pasen adelante de mi hasta que se detuvieron en uno en específico.

– Tony te quiero regalar algo.

– enserio que?

– ten estás hortensias azules fueron las últimas que plató mi mamá.

Recuerdo ese momento muy bien ese gran ramo de flores que solo las cortó pensando en mi, me sentí único y también fue el inició casi de todo y ahora solo es un recuerdo vago algo triste a decir verdad.

Y es algo irónico pues lo que estoy escupiendo son hortensias azules.

Poco a poco pude recobrar la conciencia y al mirar a mi alrededor me encontraba acostado en una habitación blanca... Talvez de hospital? Y junto a mí se encontraba Natasha que lloraba desconsolada y a un metro de mi mis padres quienes parecían sin vida.

Sonreí amargamente y al notar de que nadie había notado mi despertar comencé a soltar una pequeña risa melancólica y al fin ellos me miraron.

Natasha fue la primera en reaccionar tomándome la mano y comenzando a hablar.

– por dios Tony dormiste toda la tarde y la noche cada vez te ponías más pálido y.. y nosotros... Creíamos que.

Sus palabras se cortaron y ella comenzó a llorar más fuerte.

– tranquila Nat mala hierba nunca muere o si?

Mis palabras al contrario de tranquilizarlo hicieron que se pusiera aún más triste.

– como quieres que me tranquilicé cuando estás así, tu eres mi único y verdadero amigo en esta vida tan horrible no quiero perderte.

Le sonreí y le dije palabras que hace ya mucho tiempo había escuchado.

– no te dejare tan fácilmente ya que si tú te hundes yo lo haré contigo y así en viceversa así que este año yo te ayudaré a salir de tu hoyo oscuro sabiendo que algún día tú me sacarás del mío.

Ambos sonreímos y ella simplemente me mira saliendo de aquí saldría bien de aquí.

AmistadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora